Ir por carretera representa riesgos para los conductores, dice el titular de la Sectur
Extremar precauciones, recomienda Elizondo a quienes viajen a Acapulco
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Derrumbe en el túnel dos de la Autopista del Sol ocurrido el miércoles pasado
Foto: Notimex
El secretario de Turismo, Rodolfo Elizondo, recomendó a los turistas que viajen a Acapulco durante las vacaciones de verano a extremar precauciones, debido a las malas condiciones en las que se encuentra la autopista Cuernavaca-Acapulco, también conocida como del Sol.
Señaló que la Secretaría de Turismo desplegará a los Angeles Verdes para que cuiden a los paseantes, pero sin descuidar el resto de las carreteras del país, de tal forma que no habrá suficiente personal para concentrarlo en la autopista México-Acapulco.
El funcionario señaló que todo viaje por carretera representa riesgos que los conductores deben considerar antes de iniciar su recorrido y reconoció que las condiciones en las que se encuentra esa autopista, una de las más caras del país, aún son malas.
Elizondo confió en que las obras estarán concluidas para cuando inicie el periodo vacacional de verano -la primera semana de julio aproximadamente-, pero mientras eso ocurre recomendó a los vacacionistas ser más precavidos.
A unos días de que inicie el periodo vacacional de verano, uno de los más importantes del año, la Secretaría de Hacienda amplió el periodo de descuento del 20 por ciento hasta el 31 de agosto, que abarca la época de descanso de miles de estudiantes y burócratas.
Con esa medida la Autopista del Sol dejará de percibir alrededor de 120 millones de pesos por peajes, mientras que el Fideicomiso de Apoyo al rescate de Autopistas Concesionadas (FARAC) autorizó mil 725 millones de pesos para trabajos de rehabilitación, mantenimiento y conservación de esta carretera.
A pesar de los problemas de transporte a los que se tienen que enfrentar quienes viajan a Guerrero, sus tres destinos turísticos más importantes, Acapulco, Taxco e Ixtapa-Zihuatanejo se mantienen como algunos de los más atractivos, en especial para el turismo nacional.
Cifras de la Secretaría de Turismo y del gobierno de Guerrero señalan que durante 2006 visitaron esos destinos 5 millones 818 mil cien turistas, de los cuales 5 millones 543 mil 984 fueron mexicanos y 274 mil 116 extranjeros, de los cuales aproximadamente 30 mil fueron los llamados springbrakers.
Dichas cifras reflejan sólo a los turistas que se hospedaron en hoteles, de tal forma que el turismo nacional que llega a Acapulco, Ixtapa-Zihuatanejo y Taxco es superior si se consideran a todos aquellos visitantes que se alojan en casas propias, familiares o en la denominada hotelería informal constituida por quienes rentan casas o departamentos sin que sean inmuebles con vocación turística.
En Guerrero existen alrededor de 25 mil 600 cuartos de hospedaje, y es una de las zonas con mayor inversión en desarrollos inmobiliarios residenciales, estimada en 2 mil millones de dólares en los últimos años.
Por lo que se refiere a la autopista Cuernavaca-Acapulco, la "supercarretera" fue un proyecto que empezó mal y sigue mal. Durante sus casi 15 años de vida ha requerido constantes flujos de dinero para su reparación. Sólo en el sexenio pasado se destinaron 582 millones de pesos, que sumados a los mil 725 de la actual administración, llegan a 2 mil 307 millones. Esta cifra representa más de 50 por ciento del costo total original.
La Autopista del Sol comenzó a construirse en septiembre de 1989. El concesionario fue el Grupo Mexicano de Desarrollo, pero la empresa creó un consorcio en el que participaron además Ingenieros Civiles Asociados (ICA) y Triturados Basálticos y Derivados (Tribasa, que cambió de razón social y ahora opera bajo el nombre de PINFRA), a la sazón los tres más grandes consorcios de la construcción en México que contaban con la tecnología más moderna.