Casi lista la propuesta del GDF para la ley de extinción de dominio: Joel Ortega

Decomisan más de 100 toneladas de mercancía ilegal de plazas expropiadas

Encuentran maquinaria para hacer relojes y un túnel ''para cometer actos ilícitos''

Autoridades citan a locatarios este lunes para que presenten facturas de sus artículos

AGUSTIN SALGADO, ANGEL BOLAÑOS

Luego de revisar los más de 200 locales que conforman los centros comerciales Tepiplaza y Plaza Costa Rica, expropiados el viernes por el gobierno capitalino, las autoridades decomisaron más de 100 toneladas de mercancía que presuntamente ingresó de manera ilegal a nuestro país.

Joel Ortega Cuevas, titular de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSP-DF), reveló que, en conjunto con las autoridades federales, se investigarán los movimientos financieros de los dueños de los locales expropiados, ya que se presume que manejaban grandes cantidades de dinero.

Paralelamente, el jefe de la policía capitalina aseguró que ya esta prácticamente redactada la propuesta que el Gobierno del Distrito Federal (GDF) realizará en torno a la llamada ley de extinción de dominio, y que dentro de los dueños de los locales expropiados se detectaron a 30 personas de origen asiático.

Entrevistado al término de una ceremonia en la sede del Agrupamiento Fuerza de Tarea, el servidor público reveló que en uno de los comercios expropiados se encontró maquinaria que se utilizaba para armar relojes apócrifos, además de una especie de túnel en el que supuestamente se cometían actos ilícitos.

"Hemos encontrado cosas muy interesantes. En una bodega que se abrió estaba una maquinaria para ensamblar relojes, ahí los armaban y luego los metían al mercado. Esos son delitos de contrabando y piratería, pues evidentemente se trataban de marcas clonadas", abundó.

También trascendió que en un local, el cual fue marcado con el número 13 por la Oficialía Mayor del Distrito Federal, se detectó una puerta metálica corrediza que se encontraba escondida detrás de un altar religioso, y que a lo largo de un pasillo se conectaba con otro establecimiento.

Con respecto al marco jurídico que se pretende establecer para dar mayor certidumbre a las expropiaciones del gobierno capitalino, Ortega Cuevas estableció: "la ley de extinción de dominio va avanzada, sobre todo en su redacción. Hemos solicitado la participación de especialistas, sobre todo de España y Colombia, que nos han dado opiniones. Yo espero que pueda estar finalizada antes de septiembre y ya le corresponderá al jefe de Gobierno (Marcelo Ebrard) si la presenta por medio de la Asamblea Legislativa, para que ésta a su vez la presente en el Congreso de la Unión, o se entregue directamente por la fracción perredista de la Cámara de Diputados".

En tanto, personal de Participación Ciudadana del Gobierno capitalino estableció citas para este lunes con los comerciantes de las dos plazas de República de Costa Rica que aseguran contar con la documentación de su mercancía en regla para recuperarla. Estos, a su vez, realizaron ayer varias juntas a lo largo del día con la intención de definir los puntos de un pliego petitorio que pretenden entregar a las autoridades capitalinas.

Al mediodía se presentó en el lugar el ahora ex propietario de Plaza Costa Rica, acompañado con quienes estaban a cargo de la administración. Pretendían ingresar para "sacar algunos documentos", pero ante la negativa de los policías que custodian en el exterior, dado que en ese momento no había autoridad competente para autorizar su ingreso, se limitó a expresar a los uniformados su preocupación porque hubiera saqueos a las bodegas.

"Nosotros solamente pagábamos la renta en la administración", comentó uno de los comerciantes que arrendaba un espacio en dicha plaza, quien dijo inclusive desconocer el nombre de quién era el dueño de la plaza.

El locatario, quien no quiso dar su nombre, "aquí todos nos conocemos por apodos", dijo tener dentro de la plaza unas 200 cajas de calzado proveniente de las ciudades de Monterrey y León, y cuestionó que las autoridades no hubieran actuado solamente contra quienes tenían mercancía de contrabando, porque ahora tendrá que buscar dónde llevar su mercancía una vez que la recupere.