Deberá generar 3.4 millones de barriles diarios para evitar pago de nuevo impuesto

Obligan a Pemex a incrementar su producción para no ser sancionada

En los primeros cinco meses de este año la paraestatal ha incumplido las metas programadas

ISRAEL RODRIGUEZ

Petróleos Mexicanos (Pemex) está obligada a lograr este año una producción promedio de 3 millones 452 mil barriles de crudo al día para evitar ser penalizada con un impuesto adicional a las múltiples obligaciones tributarias a las que está sometida.

Sin embargo, en los primeros cinco meses del año la paraestatal ha mantenido una producción 8.7 por ciento inferior el objetivo, al reportar un promedio de 3 millones 153 mil barriles.

Si se considera sólo la producción promedio alcanzada en mayo pasado (último dato oficial disponible) la meta se aleja más, pues el promedio es de 3 millones 110 mil barriles, volumen 10 por ciento por debajo del objetivo establecido.

Lo anterior cobra mayor relevancia si se considera que Cantarell, el mayor yacimiento petrolero de México, que actualmente aporta 50 por ciento de la producción de crudo, declina más rápido de lo esperado, según el subsecretario de Hacienda, Alejando Werner.

Ademas, Pemex deberá incrementar su producción en 2008 para alcanzar un promedio de 3 millones 523 mil barriles diarios y evitar la sanción con el gravamen adicional.

Este impuesto es parte del nuevo régimen fiscal que se aplica a la empresa desde el primero de enero de 2006. El año pasado se le impuso una meta de producción de 3 millones 419 mil barriles diarios de crudo, pero sólo alcanzó un volumen de 3 millones 256 mil, es decir, 5 por ciento por debajo del objetivo.

Pese a no haber alcanzado la meta de producción en 2006, Pemex no fue sancionada con el nuevo impuesto, debido a que tuvo que interrumpir su producción en la sonda de Campeche por fenómenos meteorológicos que afectaron la región.

Otros impuestos a Pemex

Pemex debe también enterar al gobierno federal una serie de impuestos, entre los que destacan derecho ordinario sobre hidrocarburos, para el fondo de estabilización de los ingresos petroleros, extraordinario sobre exportación de crudo, para el fondo de investigación científica y tecnológica en materia de energía y uno más para la fiscalización petrolera, entre otros gravámenes. También funge como recaudadora del impuesto especial sobre producción y servicios aplicado a las gasolinas, diesel.

Su contribución al gobierno federal promedia en los siete años recientes 108 por ciento de la utilidad operativa. Es decir, que pagó más en impuestos, derechos y aprovechamientos de lo que obtuvo como utilidad.

En 2000 aportó 107 por ciento; en 2001, 114; en 2002, 112; en 2003, 113; en 2004, 103; en 2005, 115, y en 2006, 95 por ciento, que en conjunto representó un monto de alrededor de 400 mil millones de dólares.

Esta pesada carga tributaria ha ocasionado que mantenga un patrimonio "negativo" en los años recientes, con una marginal recuperación en 2006 y en lo que va de 2007. Esta tendencia ha obligado a la empresa a endeudarse para financiar sus operaciones, una vez cumplido el régimen fiscal.

De ahí el interés de las corporaciones internacionales, legisladores y funcionarios mexicanos para abrir a la paraestatal a la inversión privada nacional y extranjera, dado que es una gran generadora de flujo de efectivo.

Después del gigante petrolero estadunidense Exxon Mobil, Pemex es la empresa que mayores utilidades genera a escala mundial, antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización. Estos números la colocan por encima de otras como British Petroleum, Shell, Total, Chevron Texaco, Conoco Phillips, Petrobras y Statoil.