Habría obtenido más de 50%; los panistas impugnarán
Aventaja el PRI en las tres alcaldías claves de Durango
Menos de 40% de los empadronados acudió a las urnas
El Revolucionario Institucional controlará el Congreso
Ampliar la imagen Aspecto de la votación de ayer en Durango, para renovar 39 alcaldías y el Congreso local. La imagen corresponde el municipio de Lerdo, donde se observó poca afluencia de votantes. Los candidatos a alcalde son el priísta Carlos Aguilera y el panista Carlos Morales Foto: Notimex
Durango, Dgo., 1º de julio. Con un abstencionismo de entre 60 y 70 por ciento concluyó la jornada electoral en Durango, en la cual el Partido Revolucionario Institucional (PRI), según el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP), ganó los tres municipios más grandes del estado: Durango, Gómez Palacio y Lerdo.
Hasta las 23 horas, con 51 por ciento de las casillas computadas, el PAN tenía 29 mil 905 votos en el municipio de Durango, contra 41 mil 132 del PRI. De mantenerse esta tendencia, el Revolucionario Institucional volverá a gobernar este municipio, ahora con Jorge Herrera Caldera.
En el municipio de Gómez Palacio, con 62 por ciento de las casillas computadas, Ricardo Rebollo, candidato priísta, se mantenía a la cabeza con 29 mil 40 votos contra 25 mil 602 votos del panista Augusto Avalos.
En Lerdo, Carlos Aguilera recuperaría la presidencia municipal, que estaba en manos del PAN. Con 84 por ciento de las casillas computadas, el PRI tenía una ventaja con 20 mil 453 votos contra 16 mil 275 del PAN.
La directiva estatal del PAN rechazó los resultados preliminares que dio a conocer el PRI y anunció que peleará ''con todo'' ante tribunales la alcaldía de Durango y algunos distritos.
Bonifacio Herrera Rivera, candidato del PAN a la alcaldía de Durango, dijo que no confía en el Tribunal Estatal Electoral, pedirá jueces imparciales y confiables, y, si es necesario, buscará que esta impugnación llegue al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
La mañana del domingo consejeros electorales y representantes de partidos políticos descubrieron que en el consejo municipal electoral de esta capital se habían instalado dos cámaras de video.
Según Agapito Robles, presidente del consejo, un comandante de la policía municipal (cuyo nombre no recordó) le pidió permiso para colocar las cámaras con el argumento de vigilar mejor el lugar, y el funcionario accedió.
El representante electoral del PAN, Cruz Felipe Ruiz, consideró que se trataba de una intromisión del gobierno estatal para vigilar lo que sucediera en el consejo y solicitó que se quitaran las cámaras, petición que fue aceptada.
El gobernador Ismael Hernández Deras sostuvo que el equipo de video se instaló de conformidad con el consejo electoral, pero si incomodaban a alguien se las llevarían.
El propio mandatario vaticinó a las nueve de la mañana un abstencionismo de 57 por ciento. Argumentó que así lo señalaban encuestas de las que no dio más detalles; sin embargo, pidió a los duranguenses acudir a sufragar.
En el municipio de Guadalupe Victoria fueron detenidos tres panistas por un enfrentamiento con militantes del PRI; los primeros golpearon a la candidata priísta a diputada por el distrito 17, Maribel Aguilera, pero los del blanquiazul dijeron haber sido atacados. Los panistas quedaron en libertad.
En el municipio de Canatlán, los panistas señalaron que el candidato del PRI a la alcaldía, Eugenio Rodríguez, realizó proselitismo un día antes de la jornada electoral y repartió despensas a cambio de votos.
La presencia de ciudadanos en las casillas fue mínima. A las 14 horas algunas mesas receptoras no habían usado ni siquiera 20 por ciento de boletas.
Cruz Felipe Cruz, representante electoral del PAN, afirmó que el abstencionismo se debió a la guerra sucia entre partidos y a la intervención ''exagerada'' del gobierno del estado en las campañas.
Al cierre de la jornada electoral, de acuerdo con los partidos, el abstencionismo fue el gran ganador. Según el PRI, 57 por ciento no se presentaron en las urnas, para el PAN, fue poco más de 60 por ciento; PRD y PT consideraron que llegaría a 70 por ciento.