Balance de la Jornada
Nery Castillo y Juan Carlos Cacho, dupla efectiva
Ampliar la imagen Nery Castillo ha sido pieza fundamental en el planteamiento de Hugo Sánchez Foto: Ap
La estrella de Hugo Sánchez, que durante la Copa Oro estuvo opaca, recobró brillo. Luce fulgurante a pesar de los traspiés del Pentapichichi, quien con todo y sus inexplicables rotaciones hoy tiene un cuadro titular con una dupla de ataque sólida, hace apenas un mes insospechada, integrada por Cacho y Castillo, pero además en puerta tiene un futuro prometedor con la Sub-20.
El Pentapichichi sonríe porque cumplió el objetivo –que no promesa– de quedar entre los cuatro mejores de la Copa América, logro con el que superó lo hecho por su antecesor, Ricardo La Volpe, quien en Perú al frente del Tri fue eliminado en cuartos de final por Brasil. El equipo de Hugo tiene arsenal para enfrentar al favorito Argentina.
Juan Carlos Cacho y Nery Castillo hacen confirmar que como en toda buena pareja la relación está llena de sobrentendidos y mucha intuición. En la cancha se huelen y se adivinan como si hubieran ensayado todo desde el barrio. Ambos son de gran movilidad, pero el sacrificio del jugador de Tuzos ha sido básico para el buen funcionamiento.
Los titulares en el plantel de Hugo son sin duda los que jugaron contra Brasil, Ecuador y los que iniciaron ante el decepcionante Paraguay. La oncena que enfrentó a Chile quedó marcada como la suplente por su escasez de variantes, desesperante tibieza y falta de gol.
Para sorpresa de muchos en el once básico escasean los denominados lavolpistas como Pável Pardo, Carlos Salcido, Ricardo Osorio, Francisco Fonseca y Jared Borgetti. Pero tampoco han dado mucho de qué hablar Cuauhtémoc Blanco y Adolfo Bautista. Y del puma bicampeón sólo quedó un par de sobrevivientes, Israel Castro y Jaime Lozano.
La albiceleste está lejos de la inconsistencia de Paraguay y difícilmente se verá un representativo tan patético como el de Marcelo Bielsa en 2002. No obstante, a estas alturas todo se puede esperar del Tri, Hugo cuenta con el explosivo Nery Castillo, además parece que ya escuchó a sus asesores y será sin duda el mejor examen.
A la Copa América le queda una semana de vida y si el Tricolor mayor no echa por tierra los pronósticos que lo dan como víctima, el Mundial juvenil de Canadá seguirá acaparando reflectores; ya hay un partido establecido, el España-Brasil, última oportunidad de reacción para una gris canarinha sin un Robinho, Ronaldinho o Kaká en ciernes.
La Sub-20, bajo la dirección de Jesús Ramírez, también enfrentó su tercer partido de la primera ronda con un cuadro suplente debido a que ya tenía la clasificación a octavos de final en la bolsa, y para evitar una nueva tarjeta amarilla a los jugadores claves para la siguiente fase, donde chocará contra uno de los mejores terceros.
Este tricolor, aun sin el genio de Giovani dos Santos, de César Villaluz ni del capitán Patricio Araujo no desentonó ante Nueva Zelanda. El atlantista Christian Bermúdez, el futbolista más diminuto del certamen, aprovechó la gran oportunidad y fue pieza importante para redondear la marcha perfecta que da vida al sueño de otro título.
La mayoría de los equipos ha concluido sus trabajos de playa mientras las directivas completan refuerzos, pero en el panorama rumbo al Apertura 2007 hay tres clubes de gran afición obligados al título: América, Tigres y Cruz Azul.
Aguilas, que arañó el cetro en la final pasada, ha hecho adquisiciones sonoras, como la de Castromán e Insúa. En la UANL se espera que Américo Gallego saque la varita mágica que acabe con 25 años de sequía, y Cruz Azul –que quiere hacer olvidar el caso Carmona– afanado cumple los caprichos de Sergio Markarián; además espera la reacción de los adormilados César Delgado y Richard Núñez.