El litigio Infored-Radio Centro "no debe ser reducido a un pleito entre particulares"

El cierre de Monitor, asunto social, ya que se afectó la libertad de expresión

CAROLINA GOMEZ MENA

El litigio entre Infored y Radio Centro no debe ser reducido a un pleito entre particulares, porque el término de las transmisiones de Monitor "afecta un derecho constitucional: la libertad de expresión, y por ello nos compete a todos luchar por que esto no vuelva a repetirse y por que ese programa regrese a la radio", consideraron analistas, ex legisladores y comunicadores, así como trabajadores del citado medio.

Durante el desarrollo del foro La libertad de expresión: el caso Monitor, organizado por la revista Zócalo y el Club de Periodistas, el ex legislador Javier Corral Jurado criticó a aquellos que explican la salida del aire de Monitor sólo como un asunto mercantil, en el cual hubo pocas entradas monetarias y por consiguiente sobrevino la debacle económica.

"Se le quiere concentrar en el ámbito de la libre empresa, para quitarle todo valor social, y se le intenta reducir a un pleito entre particulares, pero olvidan que la información no es una mercancía, es un bien público, y por lo tanto con el término de Monitor se afecta un derecho constitucional; por ello esto es un asunto social".

Corral destacó que este litigo está "altamente distorsionado por los afanes de poder", y criticó a aquellos medios de comunicación que cuando en Venezuela no se renovó la concesión a la televisora RCTV dieron grandes espacios a la noticia, pero "ahora no aparecen las cámaras como cuando ocurrió lo del canal de televisión venezolano"

De igual forma criticó las voces que con el propósito de restar importancia a lo ocurrido "quieren generar una mala imagen de José Gutiérrez Vivó (presidente de Infored), porque más allá de las discrepancias con sus ideas, hay que reconocer su espíritu libertario y que fue pionero en la radio".

Rosa Elena Luna, coordinadora de información de Monitor, destacó justamente dicho aspecto, al afirmar que durante los 18 años que laboró en dicho medio "siempre se me dio plena libertad; nunca me dijeron 'no hables de este tema'".

Por su parte el columnista Miguel Angel Granados Chapa hizo un recuento del caso Monitor y exhortó a estar atentos al fallo del 13 tribunal colegiado en materia civil.

Los ponentes expusieron que lo que experimentó Monitor fue una "asfixia" publicitaria aplicada tanto por particulares como por el gobierno, y en este sentido Jenaro Villamil, reportero de Proceso, destacó que en la distribución de los recursos gubernamentales para contratar publicidad existe gran desigualdad, ya que mientras dos televisoras se llevan más de 70 por ciento de la publicidad gubernamental, los medios impresos reciben alrededor de 7 por ciento y el resto los de radio.

Sobre este manejo del dinero, Celeste Sáenz, secretaria general del Club de Periodistas, sostuvo que "el dinero público no es propiedad del gobierno, por lo que no se debe dar a discreción, sino con equidad en la contratación de publicidad".

Marco Sánchez, reportero vial de Monitor, hizo hincapié en un aspecto que "confirma" que el asunto no fue de exclusivo carácter monetario: el hecho de que "Monitor innovó, y por ello fue líder, y salió del aire siendo líder, pero no tuvo publicidad, y eso es un contrasentido".

Por la tarde integrantes de la organización Radioescuchas en Apoyo a Monitor realizaron una marcha desde el Angel de la Independencia hacia Los Pinos, lugar donde entregaron una carta dirigida al presidente Felipe Calderón.

Los manifestantes avanzaron ocupando sólo dos carrilles centrales de Paseo de la Reforma, y pasadas las 17 horas llegaron a las cercanías de Los Pinos.

En la misiva hacen notar que la salida de Monitor del aire "lacera fuertemente cualquier intento de democracia en México", y se exhorta a Calderón a pronunciarse sobre el tema "de una forma menos discursiva y más seria y contundente" para que se restablezca la señal de ese grupo.