Usted está aquí: domingo 15 de julio de 2007 Política Errores obligan a restructurar el Cisen; dejará la contrainteligencia

Pondrá énfasis en tareas de investigación y análisis estratégico, revelan fuentes oficiales

Errores obligan a restructurar el Cisen; dejará la contrainteligencia

Fallas del organismo, admitidas en el Consejo Nacional de Seguridad tras sabotaje a Pemex

Conservará cargo el director, Guillermo Valdés, "hombre de todas las confianzas" de Calderón

FABIOLA MARTINEZ

Ampliar la imagen Sedena, SSP y PGR desplazarán al Cisen en tareas de contrainteligencia, entre otras. En la imagen, operación de la AFI, dependiente de la procuraduría, en junio pasado Sedena, SSP y PGR desplazarán al Cisen en tareas de contrainteligencia, entre otras. En la imagen, operación de la AFI, dependiente de la procuraduría, en junio pasado Foto: Alfredo Domínguez

Ante los errores y las omisiones del Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen) -re-conocidos en el Consejo Nacional de Seguridad (CNS)-, este organismo de inteligencia civil será relevado de responsabilidades, con el fin de trasladar a otras dependencias tareas como la "contrainteligencia", revelaron fuentes oficiales.

Con la restructuración en ciernes, el Cisen pondrá énfasis en las tareas de investigación y análisis estratégico, aspectos en los que su titular, Guillermo Valdés Castellanos, se presenta como especialista. La Secretaría de Gobernación (SG) destaca su trayectoria en la "sociología política.

"Los cambios no serán inmediatos, sino paulatinos; ha quedado claro en un análisis preliminar que el Cisen tiene actualmente demasiadas responsabilidades, que le impiden un óptimo rendimiento", de acuerdo con las fuentes consultadas por La Jornada.

Valdés, ex director de GEA-ISA, única encuestadora que en el primer trimestre de 2006 colocó a su amigo Felipe Calderón como puntero en las preferencias electorales, definitivamente no será removido de su cargo.

En el primer círculo de la Presidencia de la República -agregaron las fuentes- Valdés es considerado "hombre de todas las confianzas" del mandatario.

Traslado de funciones

Tras las explosiones en dos depósitos de Pemex, reivindicadas en un comunicado por el Ejército Popular Revolucionario, y admitidas por el gobierno federal como "ataques", los integrantes del CNS analizaron el cúmulo de tareas del Cisen.

El centro de investigación fue creado en 1989, en sustitución de la entonces Dirección de Inteligencia y Seguridad Nacional (1986-1989), derivada, a su vez, de la extinta Dirección Federal de Seguridad Nacional.

Con un presupuesto para este año de mil 114 millones de pesos (50 por ciento de lo destinado al rubro de soberanía y servicios de inteligencia, a cargo de Gobernación), el Cisen tiene a su cargo actualmente áreas de investigaciones, análisis estratégico y contrainteligencia, así como un sector dedicado al fortalecimiento del equipo humano y el instrumental tecnológico especializado.

En tales aspectos, en particular el desplazamiento de personal especializado a otras dependencias, sobre todo a la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), también hay rezagos, circunstancia con la que se intenta justificar la falta de éxito en los objetivos que la ley en la materia fija al Cisen, en particular la elaboración de la "agenda de seguridad nacional".

Esta agenda incluye el seguimiento de temas vinculados con grupos armados, delincuencia organizada, seguridad pública, terrorismo, movimientos sociales y entorno internacional, entre otros, que se consideran amenazas para el país.

El Cisen, en particular, bajo la coordinación del titular de Gobernación, quien funge de secretario ejecutivo del CSN, debe proponer medidas de prevención, disuasión, contención y desactivación de amenazas y riesgos contra el territorio, la soberanía, las instituciones y la gobernabilidad.

De acuerdo con los cambios planteados, se trasladarían funciones a inteligencia militar (a cargo de la Secretaría de la Defensa Nacional), a la coordinación de Información Criminal Estratégica (de la SSP) y al área de planificación, análisis e información para el Combate a la Delincuencia de la Procuraduría General de la República.

Opacidad

Pese a las críticas de legisladores y dirigentes políticos de oposición respecto a la operatividad del Cisen, éste no variará su política de sigilo, sustentada en la ley y reglamentos en materia de seguridad nacional, así como en tres resoluciones del Instituto Federal de Acceso a la Información Pública de noviembre de 2003, 2004 y 2005.

Debido a que tiene por función operar un sistema de investigación e información para preservar la integridad, estabilidad y permanencia del Estado mexicano, el Cisen mantiene como información "reservada" el directorio de los servidores públicos que ahí laboran.

Además, es secreto el número total de plazas y vacantes. La administración calderonista puso en marcha el estatuto laboral de dicho centro, el cual determina los mecanismos para la selección y baja de los empleados.

Todo lo anterior, con el fin de asegurar la confidencialidad de la información que se maneja en el Cisen. Los empleados, de acuerdo con el reglamento, son sometidos a evaluaciones periódicas para "detectar las fortalezas y áreas de oportunidad", pero sobre todo evaluaciones sicológicas, poligráficas, toxicológicas e investigaciones socioeconómicas del personal.

Para el ingreso de empleados hay dos vías: por concurso o libre designación, cuyo salario o compensaciones por desempeño pueden ser fijados discrecionalmente por el director general del organismo.

La única información pública disponible sobre asuntos internos del Cisen son los lineamientos generales. En 2007 ha sido objeto de 18 auditorías al ejercicio presupuestal, de las que se han derivado 15 observaciones, aunque en su página electrónica no se precisa a qué se refieren las mismas.

 
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