Usted está aquí: domingo 15 de julio de 2007 Política Frustran tercer atentado contra jefe policiaco de Guadalupe, Nuevo León

En el ataque perdió la vida uno de los escoltas y dos resultaron lesionados

Frustran tercer atentado contra jefe policiaco de Guadalupe, Nuevo León

DAVID CARRIZALES

Monterrey, NL, 14 de julio. Un fallido atentado contra el director de la policía municipal de Ciudad Guadalupe, Nuevo León, Candelario Juárez Ríos, dejó un saldo de un escolta muerto y dos heridos en la colonia Rincón de la Sierra, luego de casi un mes sin que en el estado hubiera homicidios relacionados con el crimen organizado. Es el tercer ataque armado del que el oficial sale indemne.

Alejandro Garza y Garza, director de averiguaciones previas de la Procuraduría de Justicia del estado, informó que a las ocho de la mañana los agentes Ernesto Saúl Oliva Patlán, Leoncio Tinajero Maldonado y Darío Rangel Onofre se dirigían a la casa de Juárez Ríos para escoltarlo a la dirección de Seguridad Pública de Ciudad Guadalupe.

Unos 120 metros antes de llegar al domicilio, uno de los pistoleros, que habría sido comisionado para reportar los movimientos del jefe policiaco, fue sorprendido por los escoltas. Al ser abordado, el individuo utilizó un aparato de radiocomunicación para informar que estaba siendo detenido por "ministeriales", por lo que sus cómplices acudieron en su auxilio a bordo de dos camionetas.

De cada vehículo descendieron dos sicarios que dispararon contra los policías, rescataron a su compañero y escaparon. Minutos después arribaron otros policías que estaban por terminar su turno custodiando la casa de Juárez Ríos y socorristas de la Cruz Verde que se llevaron a los heridos a la clínica Oca, en el centro de Monterrey.

Una hora después murió el policía municipal Darío Rangel Onofre, que recibió disparos en el tórax y una pierna. Se reporta grave a Ernesto Saúl Oliva Patlán y estable a Leoncio Tinajero Maldonado.

A unos 120 metros de la casa de Juárez Ríos fueron localizados 52 casquillos percutidos de rifles AK-47, 37 de AR-15 y uno de pistola 9 milímetros. Asimismo, dos pistolas 9 milímetros y un rifle AR-15, presumiblemente de los escoltas que habrían repelido la agresión.

Testigos dijeron que las camionetas de los sicarios permanecieron estacionadas desde una hora antes de la balacera en las inmediaciones del domicilio de Juárez Ríos, quien sufrió dos atentados el 21 de abril y el 8 de junio. Trascendió que a raíz del incidente de hoy dejaría el cargo.

 
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