Necesario, un frente contra el despojo capitalista y en defensa de la tierra, señala informe
Para las fuerzas armadas, Chiapas es un escenario de guerra potencialmente ofensiva
San Cristóbal de las Casas, Chis. 18 de julio. En estos tiempos resulta importante interpretar el escenario militar de Chiapas, si bien ahora se encuentra menos presente en la opinión pública, ya que la militarización se ha generalizado en el territorio nacional (oficialmente a causa del "narcotráfico" y el "terrorismo"), y en el sureste parecería dentro de lo "normal".
No obstante, para las fuerzas armadas Chiapas es un escenario de guerra potencialmente ofensiva, a pesar de que la "amenaza" militar -el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN)- lleva más de 13 años de no combatir, está dedicada a construir pacíficamente, con sus bases civiles, una autonomía indígena, luego de intentar negociar con los sucesivos gobiernos federales que, de Salinas de Gortari a Fox, han incumplido sus compromisos. Felipe Carderón no ha hecho ninguno.
Si la defensa de las tierras indígenas sigue siendo motivo de guerra potencial, "la articulación entre movimientos sociales, redes, organizaciones sociales y civiles se hace imperativa. El desarrollo y el empuje de la Campaña Mundial por la Defensa de las Tierras y Territorios de los Pueblos Indígenas y Campesinos de Chiapas, de México y el Mundo (convocada por el EZLN) deberán estrechar y articular estrategias en los niveles locales, estatales, nacionales e internacionales. Esto implica hacer un frente contra el despojo capitalista, defendiendo la tierra y el territorio", señala el informe Cara de guerra, dado a conocer esta semana,
Según la investigación actualizada sobre la situación militar en los Altos, la zona Norte y la selva Lacandona, entre otros, fue retirado el campamento militar de La Sultana, en la cañada de La Garrucha, quedando las posiciones de Patihuitz, La Soledad y San Quintín, todas del 38 Batallón de Infantería (BI), aunque éstas "cambiaron su carácter, al desplegar ya no una, sino dos unidades".
El análisis identifica la presencia de agrupamientos diseminados en las tres Zonas Militares (ZM) que comprenden el territorio indígena de Chiapas. Con base en su ubicación y despliegue, se deduce que son fuerzas de intervención rápida (FIR). Esto es significativo. El Centro de Análisis Poíticos, Sociales y Económicos (Capise) documenta la situación.
La base militar en Copalar (Comitán) resguarda al cuartel general del 91 BI. Este batallón se desplegó en la cañada tojolabal, con bases de operaciones en Ejido Momón, El Edén, Vicente Guerrero, Rizo de Oro, Francisco Villa y Amatitlán. Las dos últimas fueron retiradas en 2006.
Al 91 BI, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) lo reconoce como FIR, parte de los célebres grupos aeromóviles de fuerzas especiales (Gafes), cuya creación, recuerda el análisis, "correspondió a la idea de desplegar rápidamente unidades completas de combate, transportadas en helicópteros y apoyadas con sistemas inmediatos de logística, comunicación, refuerzo y remplazo de efectivos".
Esta FIR pertenece a la Tercera Brigada de Fuerzas Especiales. De acuerdo con la página electrónica de la Sedena, las unidades de fuerzas especiales "realizan operaciones de alto impacto (contra narcotráfico, delincuencia organizada, grupos armados y antiterrorismo), bajo órdenes del alto mando".
Los retiros de posiciones, sin distender la presión militar sobre los pueblos zapatistas y el EZLN, determinaron una importante recomposición de tropas. En Momón, Vicente Guerrero y Rizo de Oro "hicieron un ajuste no menor: el Gafe que hay en cada una se mantiene como parte el 91 BI, y ahora comparte campamento y territorio con los batallones 20 y 101".
Otras situaciones "relevantes" involucran al 101 BI, el 91 BI, el 20 BI y una unidad "casi desconocida". El 101 BI está en Vicente Guerrero y Rizo de Oro (39 ZM), y también en San Cayetano, Puerto Caté, El Bosque y Simojovel (31 ZM), esto es, tiene control y posicionamiento en zonas militares distintas.
En los Altos "tampoco está solo" dicho batallón, añade Cara de guerra. Sus cuatro posiciones comparten base y territorio con el Primer Batallón de Comunicaciones Especiales o de Cuerpos Especiales (1BCE), que como el 101 BI no está jurisdiccionado en Chiapas, sino en el Campo Militar número Uno. Son fuerzas especiales, unidades de elite.
También el 20 BI fue ubicado en dos zonas militares (39 y 31). En Momón, de manera conjunta con un Gafe, y en San Andrés Larráinzar con el 1BCE. Son fuerzas "con la facultad de operar en dos zonas militares distintas y de manera conjunta con unidades de fuerzas especiales".