Aumentarán colegiaturas y se reducirán becas, advierten

Rectores: ahogará la CETU a las universidades privadas

Reunión entre académicos y diputados de la Comisión de Hacienda

ENRIQUE MENDEZ

Rectores y representantes de asociaciones de universidades privadas del país cuestionaron ayer la aplicación de la contribución empresarial a tasa única (CETU), pues consideraron que ello impactará directamente en el costo de las colegiaturas, ''se ahogará a la educación superior'' y reducirá el número de becas que otorgan.

Sin embargo, el presidente de la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, Jorge Estefan Chidiac, afirmó que si bien se buscará un punto para evitar que se cometan excesos contra las instituciones sin fines de lucro, hay casos de universidades y preparatorias privadas ''con dueños millonarios'', y ante la insistencia del rector del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (ITESM), Rafael Rangel Sostmann, de que no se apliquen nuevos impuestos a esas instituciones, el legislador priísta ironizó: ''Creo que no resulta tan mala inversión una universidad como el Tec. No creo que estén quebrados''.

Deslinde priísta

Las críticas que ayer enderezaron los rectores de las universidades en que estudió la actual clase política en el país terminaron por incomodar a Estefan Chidiac, quien recordó que la iniciativa de reforma fiscal que incluye la CETU provino del gobierno de Felipe Calderón. ''Hemos recibido quejas de todos los sectores, como si fuéramos los autores intelectuales de la reforma; a quien deben reclamarle es a la Secretaría de Educación Pública y a la de Hacienda. No somos insensatos para aprobar las cosas como están''.

Durante la reunión con la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados, los rectores del Tec, Rafael Rangel Sostmann, y de la Universidad de las Américas (UDLA), Alejandro Gertz Manero, sostuvieron un debate sobre los alcances de gravar o no las inversiones en educación superior y sobre la deducción de los donativos a ese tipo de instituciones.

Rangel Sostmann aseguró que en ningún país perteneciente a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) se grava la educación privada superior; advirtió que de aplicarse la CETU se dejarán de otorgar becas, se frenarán proyectos productivos, así como la investigación y el desarrollo. ''¿Cómo creen que me siento que ahora vengan y me digan que me van a cobrar impuestos? Es un principio que voy a defender, no una amenaza. Si nos ponen el impuesto vamos a vivir, pero no es justo ni equitativo''.

Por su parte, Gertz Manero dijo que el papel de las universidades privadas no es el de defender un negocio, sino la educación y que, en todo caso, debe encontrarse un justo medio para que las escuelas con fines de lucro sí paguen impuestos.

Previamente, el ex secretario de Seguridad Pública expresó en entrevista las diferencias que deben aplicarse en la reforma para el caso de las universidades privadas: ''Las que hagan un negociazo, que paguen impuestos, pero que no se impongan gravámenes a la educación, porque ésta no tiene por qué pagarlos''.

También en entrevista, Estefan Chidiac, quien fue el anfitrión del encuentro, descalificó al rector de la UDLA y dijo: ''El (Gertz Manero) supuestamente sabía de seguridad pública, ahora también sabe de universidades. Con todo respeto, que hable de seguridad pública, que es donde sabemos es experto''.

A su vez, Rangel Sostmann consideró que antes de afectar a las universidades privadas -pues la aplicación del impuesto hará que parte del alumnado busque escuelas públicas- debe resolverse el problema de la oferta e inclusive fortalecer a las escuelas patito. ''Mejor apoyemos a esas universidades, que se hagan buenas, que no sean pato''.

En ese sentido, Francisco Azcárraga, de la Asociación Mexicana de Universidades, reconoció que algunas instituciones comerciales no pagan impuestos, persiguen fines de lucro y aunque reciben donativos no los aplican para la educación, e inclusive existen fundaciones ''que son parapeto para esconder las relaciones públicas de grandes organizaciones que deberían pagar impuestos''.

Sin embargo, resaltó que el no permitir la deducibilidad de la nómina del personal académico y administrativo, ni de los donativos, generará un efecto regresivo, porque las universidades dejarán de otorgar becas, sobre todo a los alumnos de bajos ingresos, y el Estado tendría que absorber el costo de los jóvenes desplazados que, calculó, ascendería a 10 mil millones de pesos. ''Esto afectaría la movilidad social, sobre todo la de los más necesitados que verían perdido un canal de ascenso en la sociedad'', concluyó.

En contraparte, el diputado del Partido Acción Nacional Daniel Lutlow Kuri, ex alumno del Tecnológico de Monterrey, demandó al rector de esta institución solidaridad con la reforma, porque se busca obtener ingresos que se destinarían a la educación pública. Aseguró además que muchas personas ''han hecho fortunas'' al manejar universidades privadas y señaló que con la deducibilidad de la inversión en activos y con los créditos al salario se reduciría el monto y las escuelas pagarían por la contribución.

En respuesta, Rangel Sostmann aseguró que el Tec otorga 37 mil becas, mantiene mil 400 centros comunitarios y dos centros de desarrollo biotecnológicos y eso, afirmó, es responsabilidad social.

El jefe de la Unidad Política de Ingresos de Hacienda, Juan Manuel Pérez Porrúa, aseguró que la iniciativa de ley de la CETU ''no fue un tiro con teodolito a las universidades'', y que ''difícilmente podrían diferenciarse las escuelas con fines de lucro con las que no lo tienen'', y consideró que el impuesto permitiría obtener entre 8 mil y 13 mil millones de pesos.

Rangel aseguró que ese cálculo no es correcto, pues con la tasa prevista apenas se obtendrían entre 2 mil y 3 mil millones de pesos si se aplica la contribución a las escuelas privadas.