Usted está aquí: viernes 20 de julio de 2007 Economía Desalentador panorama para productores de maíz ante el TLCAN, prevé CEESP

México seguirá dependiendo de importaciones del grano en los próximos años

Desalentador panorama para productores de maíz ante el TLCAN, prevé CEESP

EDUARDO MARTINEZ CANTERO

En los próximos años México seguirá dependiendo de importaciones de maíz, a pesar de ser el cuarto productor mundial del grano, aseguró Francisco Lelo de Larrea, subdirector de investigaciones del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP).

Durante la presentación del libro: La economía política del maíz en México, el representante del organismo señaló que la falta de infraestructura y de tecnología avanzada, el poco acceso al financiamiento y la mala canalización de recursos públicos para los productores, permiten prever que el panorama ante la apertura comercial de 2008, establecida en el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), no sea alentador.

Explicó que en los próximos años la demanda de maíz del exterior será de entre 5 y 6 millones de toneladas, lo que habla de que los avances en el campo van a paso lento.

Uno de los factores más importantes para sacar adelante no sólo el cultivo de maíz, sino gran parte de la actividad agraria, es que las autoridades conecten a los productores con los mercados de alto consumo.

Destacó la necesidad de revisar los programas dirigidos al campo, los cuales ''ayudan a abatir la pobreza, pero no incrementan la producción'', lo cual habla de un desequilibrio en la toma de decisión para canalizar los recursos, ya que el gasto público en el sector agrario ha aumentado de manera considerable, pero la producción del grano se mantiene a la baja, afirmó el investigador.

''Los programas de apoyo, sobre todo el Procampo, han logrado destinar los beneficios a quienes más los necesitan mediante transferencias en efectivo. Sin embargo, no se ha logrado mejorar la rentabilidad de cultivos a niveles similares a los de nuestros socios comerciales'', dijo.

Lelo de Larrea aseveró que de aprovecharse la oportunidad que ofrece el mercado creciente de biocombustibles, y que ha provocado que el precio del maíz se incremente entre 45 y 48 por ciento, México podría situarse como uno de los proveedores más grandes del mundo de este tipo de granos.

Sobre el control de precios, dijo que el impacto se transmite al grueso de la población; sin embargo, consideró que no es tan grave pues se trata de medio punto porcentual al año. ''Los precios no se van a mover, en tanto no haya un política clara en materia de producción de etanol, por lo que el gasto público seguirá siendo uno de los factores más importantes'', estimó.

En la publicación del CEESP, la iniciativa privada demanda la aprobación del marco legal que permita utilizar semillas mejoradas, pues a decir de los empresarios, éstas le darían mayor competitividad al sector agrícola nacional.

 
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