Tonto, emitir mapas para que indocumentados cruzaran la frontera: el embajador
Sarukhán critica la intromisión del foxismo en debate migratorio en EU
Washington, 20 de julio. El embajador de México en Estados Unidos, Arturo Sarukhán, criticó al gobierno del ex presidente Vicente Fox por haberse entrometido en el debate sobre la reforma migratoria y lamentó la "tonta" decisión de ofrecer mapas a emigrantes para cruzar la frontera.
"El pasado gobierno mexicano se hizo mucho daño a sí mismo y a quienes creen en la reforma migratoria integral, por la manera en que trató de posicionarse públicamente en el debate interno de Estados Unidos", consideró.
En declaraciones al diario The Washington Times, que ha criticado editorialmente la migración indocumentada, el diplomático consideró un "error tonto" la emisión de una guía de migrantes por la cancillería del gobierno foxista, así como los mapas que elaboró la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
Sarukhán se refería a las guías que en 2005 distribuyó el gobierno mexicano para dar sugerencias a los ciudadanos que planearan entrar sin documentos a Estados Unidos, sobre las mejores vías para lograr su objetivo. Del mismo modo, aludió a los mapas que distribuyó el año pasado la CNDH para ubicar los sitios donde los migrantes podían encontrar depósitos de agua durante su travesía.
"No creo que esa sea la forma de trabajar sinérgicamente con Estados Unidos para manejar conjuntamente una frontera muy compleja", opinó Sarukhán.
Enseguida consideró que "es muy difícil para México pontificar hacia el norte lo que no hace hacia el sur".
No fue el único punto en que se mostró autocrítico respecto a las políticas de su país, pues señaló: "a menos que corrijamos el desafío fundamental de la violación de los derechos humanos de los latinoamericanos cruzando la frontera por México, me va a ser difícil poner el dedo y decirles a ustedes (los estadunidenses) que deben proteger los derechos humanos de mis ciudadanos en este país".
Dejó en claro que México está pendiente de los cambios que en materia migratoria pueda realizar el Congreso de Estados Unidos, y agregó que las remesas de connacionales a sus familiares no son la solución a largo plazo para los problemas del país, particularmente porque se trata de una señal de que muchos de los mejores trabajadores salen de la nación.
"Ningún país puede crecer si no es capaz de retener a sus hombres y mujeres. Algunos de ellos, no sé si son talentosos o no, pero ciertamente son arrojados."
Aseguró que ambos países trabajan "extremadamente bien" para asegurarse de que la frontera común no sea usada para socavar la seguridad nacional respectiva.
Los funcionarios mexicanos entienden el nerviosismo de los estadunidenses por tener una frontera segura y especialmente, destacó, por las posibles consecuencias de que un problema de seguridad fronteriza estuviera detrás de un ataque a Estados Unidos.
"El día que eso ocurra, esta relación, tal y como la conocemos, habrá terminado", convino.