Confirman que la epidemia se debe al consumo de agua y alimentos contaminados
Refuerza Ssa vigilancia epidemiológica en Tlalpan tras brote de gastroenteritis
Autoridades conocían del caso desde inicios de julio, pero lo revelaron hasta el viernes 22
Los primeros estudios de laboratorio indican que los trabajadores de hospitales e institutos nacionales de salud de la zona de Tlalpan, que presentaron una infección por gastroenteritis, tienen un parásito conocido como ciclospora cayetanensis, el cual se adquiere por ingerir agua o alimentos contaminados.
Además de los 80 trabajadores enfermos del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y de la Nutrición (INCMN) Salvador Zubirán, hay 72 afectados más del Hospital Siquiátrico Fray Bernardino Alvarez y 111 del Instituto Nacional de Siquiatría Ramón de la Fuente Muñiz, informó la Secretaría de Salud (Ssa).
Hasta el viernes, los estudios clínicos no habían podido confirmar si la infección podría transmitirse de persona a persona; sin embargo, la Ssa dispuso el fortalecimiento de la vigilancia epidemiológica de las enfermedades diarreicas agudas, con énfasis en la búsqueda intencionada de casos probables.
Para ello, se organizaron tres brigadas con residentes de la Dirección General de Epidemiología, personal del Centro Nacional de Vigilancia Epidemiológica y Control de Enfermedades (Cenavece) y la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), así como personal de los Servicios de Salud del Distrito Federal.
Entre las actividades que se llevarán a cabo está la toma de muestras que se enviarán a la Jurisdicción Sanitaria de Tlalpan para su estudio en el Instituto Nacional de Diagnóstico y Referencia Epidemiológica (INDRE).
Por lo pronto, el INDRE descartó que la infección gastrointestinal que presentaron los empleados del hospital siquiátrico Fray Bernardino Alvarez se deba a salmonela.
Las infecciones gastrointestinales que sufrieron trabajadores del sector salud iniciaron desde los primeros días del mes, pero oficialmente se informó del problema hasta el viernes pasado, luego de que personal del INCMN realizó una protesta durante varias horas afuera de las instalaciones del instituto porque ésta, dijeron, no es la primera vez que los empleados se enferman por consumir los alimentos que les sirven en el comedor del hospital.
De hecho, los empleados del sector salud responsabilizaron a la jefa del Departamento de Nutrición Hospitalaria y Ambulatoria, María Eugenia Bueno Cervantes, porque ha sido omisa en la solución de una serie de demandas que han presentado sus colaboradores, quienes señalaron que, por el contrario, son víctimas de maltrato y hostigamiento laboral. Al grado de que se les prohíbe hasta ir al baño, dijeron.
En tanto, del análisis de laboratorio practicado a las 72 muestras del brote infeccioso que inició el 7 de julio en el Siquiátrico Fray Bernardino Alvarez, el INDRE encontró que en todos los casos se presentó dolor y distensión abdominal, náusea y malestar. Casi todos cursaron con diarrea y una tercera parte con vómito.
De los 111 casos del Instituto de Siquiatría, se reportó que todos los trabajadores tuvieron diarrea, dolor de cabeza y malestar general, mientras 22 por ciento presentó fiebre.
Las muestras del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y de la Nutrición y del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias, institución donde también hubo afectados, aunque la Ssa no informó sobre el número, el estudio de laboratorio reportó el aislamiento de Ciclospora cayetanensis en las evacuaciones de los pacientes.
Los especialistas comentaron que este tipo de cuadros infecciosos se caracteriza por provocar a los pacientes diarrea líquida, explosiva, debilidad, pérdida de peso, inflamación abdominal, náusea, vómito, cólicos, dolor muscular y fiebre.
Sin embargo, también explicaron que en algunas personas el padecimiento puede ser asintomático.