Largas colas en Europa y una bomba desactivada frente a librería en Pakistán

Se desbordó la pottermanía en el mundo; colapsos viales en el DF

AGENCIAS

La pottermanía dio la vuelta al mundo desde la ciudad de Londres, Inglaterra, donde la campeona mundial de lectura rápida Anne Jones sólo necesitó 47 minutos para devorar las 199 mil 900 palabras contenidas en las 607 páginas de Harry Potter and the Dealthy Hallows, séptimo y último libro de la saga del mago adolescente. En la ciudad de México, más de 3 mil personas se congregaron en tres librerías causando tumultos e incluso caos vial en las inmediaciones, esperando que se iniciara, en el primer minuto del sábado, la venta de la edición inglesa de los ejemplares de la editorial Bloomsbury, la cual prevé que sus ventas alcancen -sólo este fin de semana en todo el mundo- más de dos millones 500 mil ejemplares .

En la capital mexicana las multituldes causaron incluso caos vial. El establecimiento más concurrido fue la sede de la librería Gandhi ubicada en el sur de la ciudad, donde al menos "unas dos mil personas llegaron en automóvil" colapsando los estacionamientos cercanos y algunas calles circundantes, dijo un portavoz de la secretaría de Seguridad Pública. Ahí también se vio a niños con capas negras como las del héroe literario y jovencitas con el uniforme de Hogwarts, aguardando varias horas el inicio de la venta.

Ventas inesperadas

La preventa de Harry Potter and the Dealthy Hallows alcanzó en México "cifras insospechadas", con más de siete mil ejemplares, tanto de la edición importada de Londres como de la versión estadunidense, explicó Alberto Achar, gerente de mercadotecnia de Gandhi, librería que vendió cerca de cinco mil volúmenes bajo el sistema de apartado. Lo mismo sucedió en la cadena de El Sótano, donde se comerciaron más de dos mil ejemplares y se congregaron "unas mil personas" en la sucursal del sur.

El fenómeno de la pottermanía también estuvo presente en la céntrica colonia Condesa de la capital, donde la librería y editorial Fondo de Cultura Económica recibió a cerca de 800 niños y adolescentes. Las largas filas continuaron la mañana del sábado en unos cinco comercios del centro de la ciudad. "Estoy feliz por saber el final, lo mejor de todo fue que Harry Potter no se murió", comentó Ana Rendón, estudiante de 14 años, quien tras comprar el libro leyó inmediatamente las últimas páginas.

En Londres, la cadena WHSmith -que abrió 400 tiendas en Reino Unido- vendió 15 ejemplares por segundo durante las primeras dos horas del sábado. El portavoz de la librería dijo: "No hay nada comparable en la historia de la venta editorial". En tanto, en Israel, algunos comerciantes, incluso, ignoraron el sagrado día de descanso del sabbat -que prohíbe abrir tiendas durante esa jornada-, para vender la novela. En Tailandia, el embajador británico, con un gorro de mago en la cabeza, fue el encargado de entregar los primeros ejemplares a los clientes de una librería.

En Pekín, más de cien personas se abalanzaron sobre los ejemplares del aprendiz de brujo -conocido en China como Hali Bote- a una librería cercana al Estadio de los Trabajadores, cuando ésta abrió sus puertas a las 06:30 horas locales.

El viernes, socorristas debieron rescatar a un ávido fanático de un lago en Canberra, en Sydney (la capital australiana), donde se sumergió para recuperar un comprobante de compra con el que podría adquirir su ejemplar. En Pakistán una bomba fue desactivada la noche del viernes en un vehículo estacionado frente a un centro comercial de Karachi, la capital económica de ese país, donde debía congregarse una multitud desde el amanecer para comprar la séptima parte de la saga de Harry Potter, informó la policía.