Descubren misiles chinos en poder de la insurgencia
Fuerzas de EU irrumpen en prisión iraquí; arrestan a seis funcionarios
Bagdad, 22 de julio. Las fuerzas estadunidenses irrumpieron este fin de semana en una prisión iraquí al oeste de Bagdad, donde liberaron a un número no especificado de prisioneros y arrestaron a seis funcionarios iraquíes, aseguró hoy el Partido Islámico en Irak, mientras el ejército de Estados Unidos afirmó que descubrió misiles de fabricación china en manos de la insurgencia iraquí, que, sostuvo, presumiblemente fueron introducidos por grupos iraníes.
"Una unidad estadunidense irrumpió el sábado en una prisión del Ministerio del Interior cerca del estadio Al Shaab International en Bagdad, arrestó a seis funcionarios y halló instrumentos de tortura en un cuarto secreto", según un comunicado del Partido Islámico de Irak en Internet.
Las fuerzas arrestaron también a un número no determinado de vendedores fuera de la prisión que supuestamente pertenecían a milicias armadas y estaban implicados en asesinatos extra judiciales de familiares de prisioneros, agregó el grupo.
La versión no fue confirmada ni desmentida por el ejército invasor, que a su vez informó del hallazgo de misiles de fabricación china en manos de la insurgencia iraquí, que presumiblemente fueron introducidos por grupos iraníes. "Hemos visto (en Irak) material de guerra y armas provenientes de otros sitios, pero pensamos que llegaron a través de Irán", declaró el contralmirante Mark Fox, en un encuentro con la prensa en Bagdad.
"Hay misiles que en realidad son fabricados en China y que creemos que llegan también a través de Irán", añadió.
Según el oficial estadunidense agentes iraníes podrían haber suministrado proyectiles conocidos como EFP (capaces de perforar blindaje) a extremistas iraquíes.
En el terreno, la violencia sectaria dejó este domingo tres muertos en ataques separados en Bagdad y la sureña ciudad chiíta de Basora, donde también un soldado británico perdió la vida.
Con su deceso asciende a 163 el número de soldados ingleses abatidos en Irak desde la invasión angloestadunidense el 20 de marzo de 2003.