Exige indagar si parte de esos fondos pertenece a líderes panistas y a funcionarios
Rechazar dinero confiscado a Ye Gon, demanda AMLO al Poder Judicial
Nuevo Laredo, Tamps., 2 de agosto. Desde esta ciudad fronteriza, donde comienza el país, Andrés Manuel López Obrador llamó a los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación a rechazar la parte del dinero confiscado al empresario de origen chino Zhenli Ye Gon que el gobierno de Felipe Calderón decidió otorgar al Poder Judicial.
Insistió en que jueces y ministros están obligados a rechazar "esa tajada", ya que se trata de un soborno que les impedirá luego juzgar al empresario en México.
"Es una vergüenza; están chayoteando; están maiceando" a los responsables de impartir justicia en el país, advirtió el "presidente legítimo" en su primer día de recorrido por Tamaulipas, en el que el tema del empresario encarcelado en Estados Unidos por tráfico de drogas volvió a salir a relucir.
Al llegar al aeropuerto de Nuevo Laredo, un grupo de simpatizantes lo recibió con un mensaje escrito a mano en una cartulina: "No tiene la culpa el chino, sino el que lo hace paisano". En ese ambiente, López Obrador recalcó que "el grupo de delincuentes más peligroso del país, que es la banda de Los Pinos", quiere "tapar a toda costa el asunto de Ye Gon, porque lleva al financiamiento ilegal a la campaña de Felipe Calderón".
Tanto en entrevistas colectivas como en siete mítines y concentraciones que encabezó en igual número de municipios colindantes con la frontera de Estados Unidos, recalcó que debe investigarse "la ruta" de los más de 200 millones de dólares encontrados en la casa de Las Lomas propiedad de Ye Gon, sobre todo porque el empresario declaró que parte de ellos, específicamente 150 millones de dólares, son propiedad de funcionarios federales y de dirigentes panistas.
Acompañado por Luis Linares Zapata -integrante del "gobierno legítimo"-, del dirigente estatal perredista, Miguel Angel Almaraz, y candidatos a alcaldes, López Obrador calificó de ridículas las afirmaciones del procurador general de la República, Eduardo Medina Mora, y del propio Calderón, de que el dinero confiscado a Ye Gon no es evidencia ni prueba en las investigaciones, y por ello decidieron repartirlo.
Insistió en que los miembros del Poder Judicial "no pueden seguirse envileciendo" y deben rechazar el dinero confiscado, porque tienen la responsabilidad de llevar a cabo las averiguaciones sobre la procedencia de esos más de 200 millones de dólares y las actividades delictivas de Ye Gon, quien debe ser extraditado a México.
Sin embargo, eso es lo que "el gobierno espurio" no quiere y por ello la decisión de dar carpetazo al asunto, aseveró. Exigió que Calderón informe a la opinión pública a qué fue a Estados Unidos el secretario del Trabajo, Javier Lozano Alarcón, uno de los implicados en el chinogate.
Desde Nuevo Laredo, "le pregunto de manera específica a Calderón si Lozano se entrevistó con algún funcionario del Departamento de Justicia de Estados Unidos". El emplazamiento lo formuló durante una entrevista con el noticiario Conexión Latina, de la estación Radio Latina, perteneciente al Grupo Imagen, de Olegario Vázquez Raña, la cual le dio amplio espacio para exponer sus propuestas a los tamaulipecos y denunciar que le robaron la elección de 2006.
Después recorrió otros seis municipios que hacen frontera con Estados Unidos: Ciudad Guerrero, Mier, Miguel Alemán, Camargo, Díaz Ordaz y Reynosa, en los que insistió en la necesidad de organizarse y crear una red de representantes del "gobierno legítimo", para evitar otro fraude como el del 2 de julio de 2006.
Gobernador sobregirado
Primero en el mítin en Nuevo Laredo, al que asistieron más de 2 mil simpatizantes, que se atrevieron a retar al sol quemante de mediodía, y después en una concentración en la plaza central de Ciudad Guerrero -un poblado con sólo mujeres, niños y ancianos- denunció que Tamaulipas fue uno de los estados en que hubo fraude, orquestado por el gobernador de la entidad, Eugenio Hernández Flores, en contubernio con Elba Esther Gordillo.
"No hablo por hablar, tengo pruebas de cómo el gobernador priísta operó el fraude para favorecer" al ex candidato presidencial panista. Ante una audiencia pequeña, que lo escuchaba con extrema atención, López Obrador leyó los pasajes de su libro La mafia nos robó la Presidencia en los que se alude a la conversación de Gordillo con Hernández Flores, instruyéndolo a operar el fraude la tarde del 2 de julio del año pasado y a cobrarle luego "el favor a Calderón".
Se refirió además a otra conversación, ésta el 3 de julio, entre el entonces secretario de Comunicaciones, Pedro Cerisola, y el gobernador Hernández Flores. El funcionario foxista agradece el apoyo y le dice incluso al gobernante tamaulipeco "que se sobregiró".
Es decir, explicó López Obrador a su auditorio, el gobernador rellenó más urnas con votos para Calderón, hizo más acciones fraudulentas de las que le pidieron.
Durante el recorrido por la "frontera chica o ribereña", López Obrador recibió nuevamente infinidad de muestras de apoyo. Al municipio de Mier llegaron perredistas de Parás -localidad vecina, de Nuevo León- con el edil Crecencio Oliveira al frente, así como el dirigente partidista Rubén Hinojosa y, antes, en Nuevo Laredo, un hombre mayor, Agustín Galván, le dijo que depositó 200 pesos a la cuenta del "gobierno legítimo".
Toda la jornada, el tabasqueño estrechó manos, se tomó fotos con decenas de hombres y mujeres de todas las edades y autografió y dedicó muchos ejemplares de su libro reciente. Uno de los que lo adquirieron fue Santiago Solís Rodríguez, mejor conocido como Chago, candidato panista a la presidencia municipal de Díaz Ordaz.
Pero no sólo eso, Chago se acercó a saludar al "presidente legítimo" y le pidió que le dedicara el libro. López Obrador concluyó la jornada con un mítin nutrido en Reynosa. La gente lo esperó más de una hora para escucharlo.