Sus problemas son económicos y de servicios, asegura
Milpa Alta, poco atractiva para la delincuencia, dice la SSP-DF
En la delegación Milpa Alta, los delitos por mes se pueden contar con los dedos de una mano, y los que suceden son generalmente lesiones por peleas y robo de objetos, pues esta demarcación presenta características muy particulares, donde predomina el arraigo a las costumbres de los pueblos que la integran, lo que algunas veces significa que la propia comunidad castigue a sus infractores.
Por otra parte, las condiciones económicas, de infraestructura y servicios son limitadas, lo que resulta poco atractivo para la delincuencia. En esta demarcación, que representa el segundo territorio más grande del Distrito Federal, la policía capitalina sólo tiene ubicados dos puntos conflictivos que requieren atención en materia de equipamiento urbano y seguridad.
Milpa Alta ocupa el último lugar en la entidad en cuanto a viviendas con drenaje, y el segundo sitio más bajo en cobertura de energía eléctrica y disposición de agua entubada. Además, se estima que hay 433 hectáreas ocupadas por asentamientos en los bordes de los poblados rurales.
De acuerdo con una radiografía elaborada por la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal (SSP-DF), la insuficiencia de vías de comunicación dificulta la plena incorporación de sus habitantes a la dinámica metropolitana, aunque para los nativos que se niegan al cambio, es positivo para preservar las tradiciones y modos de vida en Milpa Alta.
En este territorio habitan más de 3 mil hablantes de lenguas indígenas, que representan cuatro por ciento de la población. Las tres principales son el náhuatl, el otomí y el mixteco.
El estudio indica que, en esta demarcación, la infraestructura educativa disponible es insuficiente, pese a que existen planteles de todos los niveles educativos.
En materia de salud, la situación resulta aún más deficitaria ya que sólo existen 11 centros de salud y un hospital general de especialidades, dependientes del Gobierno del Distrito Federal; una clínica de medicina familiar del ISSSTE y una clínica periférica de la Facultad de Odontología de la UNAM.
Los habitantes de la demarcación tampoco cuentan con equipamiento deportivo, cultural y recreativo. No obstante, destaca el análisis, como fuente de diversión tienen los festejos religiosos en cada pueblo o ferias de tipo comercial, como la del mole en San Pedro Atocpan.
De acuerdo con el registro de la Dirección General de Estadística e Información Policial sobre la incidencia delictiva ocurrida en la delegación, durante el periodo comprendido del 1º de enero al 28 de febrero de 2007, solo ocurrieron dos delitos. El primero fue por encubrimiento por receptación y el segundo, robo a transeúnte.
El narcomenudeo tiene una mínima presencia en esta delegación, ya que sólo se tienen identificados por denuncia ciudadana 15 puntos de venta de droga.
Hot spots
Las zonas conflictivas (hot spots) detectadas en la demarcación son:
1. El área delimitada por las avenidas México, Jalisco, Yucatán y Colima, donde se ha detectado robo a negocio sin violencia, robo a transeúnte y robo a vehículo sin violencia. La SSP-DF especifica que sobre la avenida Jalisco se encuentra un Colegio de Bachilleres, donde los estudiantes, al salir, en ocasiones ingieren bebidas embriagantes, causando riñas o alteraciones al orden público; a un lado del colegio se encuentra un paradero de microbuses que dificulta la vialidad, además de que los conductores cometen faltas administrativas sobre todo en la noche; sobre la avenida Constitución se encuentran los bancos, por lo que los usuarios dejan sus vehículos estacionados en sus inmediaciones, situación que es aprovechada para el robo de accesorios o a transeúnte.
2. En las calles de Dr. Gastón Melo, Ignacio Allende, Cruztipac y 1er. Callejón. Se registran robo de autopartes, a transeúnte y a casa habitación sin violencia.
Uno de los problemas principales de la zona es el tianguis que se instala los domingos, lo que provoca gran afluencia peatonal y, por consiguiente, incremento de la incidencia delictiva. Asimismo, la SSP-DF apunta que existe una escuela secundaria que requiere de vigilancia policial por petición de los padres de familia y maestros, en virtud de que en ocasiones los estudiantes provocan riñas o alteran el orden público.