Jóvenes deben aprender valores, señala rector de la Uia
El cambio en México no vendrá de los partidos: Morales Orozco
La transformación de México no va a venir de los partidos políticos, sino de la sociedad civil, y es precisamente por eso que los jóvenes de hoy deben recibir una educación de calidad no sólo académica, sino también de valores humanos, como solidaridad, equidad, búsqueda de la verdad, de la justicia y de la transparencia, para construir un país más justo, afirmó el rector de la Universidad Iberoamericana (Uia), José Morales Orozco.
En entrevista, luego de dar la bienvenida a alumnos de nuevo ingreso, aseguró que las instituciones educativas, en particular las universidades públicas y privadas, deben asumir como una de sus tareas "prioritarias" fomentar en los estudiantes un pensamiento "primero autocrítico y luego crítico, que los ayude a comprender y transformar la realidad.
"Sabemos -indicó- que se trata de un trabajo a largo plazo, porque las transformaciones de fondo no se dan de la noche a la mañana", y enfatizó que los jóvenes también tienen "muchos valores y carencias, como tuvimos nosotros, pues no podemos decir que son mejores o peores. Son distintos. Por eso es tan importante tocar los temas que más les interesan, como el medio ambiente y el arte, porque cuando lo logramos responden con mucha generosidad".
Se trata de jóvenes muy exigentes y críticos, insistió, que buscan coherencia, pues el argumento de autoridad, "que antes era tan importante, para ellos no significa nada. Ahora, la autoridad la da la coherencia de una persona entre lo que dice y hace, por aquello de que las palabras mueven, pero los ejemplos arrastran".
Morales Orozco señaló que buscan coherencia, pero faltan esos modelos a quiénes seguir, que otras generaciones sí tuvieron, por eso el reto es partir de sus inquietudes y ofrecerles esos valores que los ayudarán a realizarse no sólo como profesionistas, sino para luchar por un México mejor, más justo, transparente y menos corrupto.
En la Uia, afirmó, "no sólo buscamos la excelencia académica. También que mañana, donde quiera que estén nuestros egresados, tengan la preocupación de poner al servicio de los más necesitados aquello que aprendieron en la institución".
Las universidades son exitosas en la medida en que logran realizar a sus ex alumnos y por la calidad humana, y no sólo profesional, con la que enfrentan los retos de la sociedad. Por ello, insistió que no se puede evaluar a una institución de educación superior sólo a partir de sus "logros más inmediatos, sino a partir de dónde están sus egresados y con qué calidad profesional y humana realizan su trabajo y cuál es el grado de compromiso con los más desfavorecidos".