Mauricio Valdés presenta una instalación sonora en la Casa de Cultura Oaxaqueña
Falta incorporar ''nuevas tecnologías a la composición''
Oaxaca, Oax., 3 de agosto. A pesar del vigoroso empleo de nuevas tecnologías en el panorama musical mexicano, en lo concerniente a la composición, hasta la fecha es un área que no ha logrado penetrar ni incidir de manera determinante dentro del ámbito institucional, en particular las instancias relacionadas con la educación.
De ello está convencido el compositor Mauricio Valdés (DF, 1976), quien sostiene que este desfase podía entenderse dado los elevados costos de esos equipos que resultaban prácticamente inalcanzables. Sin embargo, considera que ese aspecto quedó abatido y atribuye tal carencia más a una cuestión de anquilosamiento y mentalidad.
''Cuando comencé mi trabajo dentro de esa área, en 1994, las máquinas costaban entre 25 y 30 mil dólares; ahora los precios fluctúan entre mil 500 y 2 mil dólares. Ya no es, entonces, un problema de infraestructura, sino de instituciones", señala en entrevista.
''Los planes de estudio en las escuelas de música no se han acercado tanto a la parte tecnológica, la contemplan como algo que se tenía que abordar porque se hacía en Europa y Estados Unidos. La formación de un compositor sigue por la misma línea desde los años 40 y eso desgraciadamente no ha dejado que las instituciones lo adopten."
Autor de la instalación sonora H.I. (Human Interactive), creada ex profeso para la presente versión de Instrumenta Verano y que concluirá exhibición el día 11 en la Casa de la Cultura Oaxaqueña, el también especialista en diseño sonoro precisa que salvo lo hecho en la Universidad Nacional Autónoma de México, la Escuela Superior de Música y la Universidad de Guanajuato, en el país no existe arraigo en el empleo de tecnología en el arte sonoro y el desarrollo de nuevas aplicaciones.
"La música electroacústica está muy fuerte en México, basta mencionar lo que hacen compositores como Javier Alvarez, en Yucatán; Rodrigo Sigal, en Morelia o Rogelio Sosa, en el DF; sin embargo, es imperativo desarrollar una parte de esa vertiente que se ha soslayado: el desarrollo de nuevas aplicaciones", indica Valdés.