¿La Fiesta en Paz?
Josetomasfóbicos
En La Jornada del pasado viernes apareció un interesante desmentido nada menos que del "apoderado legal y abogado patrono" del matador Enrique Ponce, el señor don Santiago García Luque, sobre una nota mía publicada en la sección de toros ¡el 18 de junio pasado!, es decir, 46 días después.
Pero como los abogados, junto con los científicos y economistas, y bastante atrás políticos y locutores, se han convertido en los sacerdotes de la posmodernidad, voceros exclusivos y excluyentes de lo que es verdad y es mentira, al margen de lo que suceda en la realidad, no es de extrañar que entre la fecha de publicación del artículo y la del desmentido haya transcurrido mes y medio.
"Informaciones rotundamente falsas... Enrique Ponce no ha boicoteado a ningún compañero jamás y menos a José Tomás... ambos toreros han toreado juntos en las plazas españolas en infinidad de ocasiones... Nuestro cliente no tiene negocios de promotor de plazas de toros, ni en México ni en España...", son algunas de las refutaciones en la carta.
Involuntariamente agallegado resulta este párrafo: "A título meramente informativo, recordarles que José Tomás se retiró de la tauromaquia el 16 de septiembre de 2002... reapareciendo en la Monumental de Barcelona el pasado 17 de junio... Por ello, es imposible que mi cliente ejerciese boicot alguno contra el señor José Tomás, dado que se encontraba retirado"... ¿Y antes?
Se puede boicotear de muchas formas, además del veto descarado de que fue objeto en la México José Tomás, mientras estuvo activo, claro, no antes ni después, digamos de 1996 a 2002. En esas siete temporadas Tomás se convirtió en el torero más importante de España, arrasando en todos los cosos, llevándose todos los premios y haciendo evidente el contraste brutal de su tauromaquia con las de otras figuras, incluido Ponce.
Tanta verdad torera tenía que ser frenada, y qué mejor hacerlo fuera del ruedo. Mientras Tomás estuvo en activo, no antes ni a su regreso, ¿eh?, ¿cuántas veces alternó Ponce; con él en Madrid, en Sevilla, en Valencia o en Barcelona, donde en 1999 todas las figuras fueron sucesivamente bañadas por el diestro de Galapagar? Búsquele y comprobará que sacarle la vuelta a un torero es otra manera de excluirlo. A mayor abundamiento, Ponce prefirió no alternar con José Tomás y El Juli en la reciente corrida de Avila a beneficio de la Plataforma para la Defensa de la Fiesta.
Y mientras, en 12 años el promotor de la México nos endilgó una cauda de cartuchos quemados españoles que no eran ninguna molestia para Ponce, éste gozó de las preferencias no tanto del público como de la empresa y los medios para escoger o cambiar ganado y alternantes, con una comodidad ilimitada. Ha sido socio taurino, no inversionista, que a la postre a influido en el desastroso rumbo de la fiesta de toros en el país. Si quiere, precisamos hechos, nombres y fechas.