Usted está aquí: martes 14 de agosto de 2007 Política Comprueba INM legal estancia de los cuatro catalanes detenidos y los libera

Los españoles recibieron "buen trato, apegado a derechos humanos", dice la dependencia

Comprueba INM legal estancia de los cuatro catalanes detenidos y los libera

"Hablaremos más adelante, con la cabeza más fría", expresa uno de los turistas

EMIR OLIVARES ALONSO

Tras cinco días recluidos en la estación migratoria de Iztapalapa, los cuatro ciudadanos españoles que fueron aprehendidos en Oaxaca el pasado 5 de agosto, obtuvieron su libertad luego de que el Instituto Nacional de Migración (INM) comprobó su ingreso legal a México.

Al salir de la estación migratoria, alrededor de las nueve de la noche de ayer, los extranjeros Laia Serra, Ariadna Nieto, Nuria Morelló y Ramón Sesén, todos de la comunidad autónoma de Cataluña, no ocultaban su alegría, aunque sus rostros reflejaban cansancio y confusión.

"Estamos tratando de situarnos. Nos sentimos contentos de estar en la calle, aunque indignados de cómo ha ido la situación. Estamos bien, ya libres y muy cansados, hemos vivido días de tensión e incertidumbre", aseguró a este diario Ramón Sesén, poco después de haber abandonado la estación migratoria.

Debido a la premura de su liberación, los catalanes tuvieron que esperar a las afueras del centro de retención de Iztapalapa a que sus amistades pudieran llegar al lugar. El encuentro fue emotivo al grado que fueron recibidos entre aplausos, abrazos y gritos de júbilo.

Sesén aseguró que si bien se les dio un buen trato en la estación migratoria, sí se sienten indignados. "Ahora lo que queremos es descansar; ha sido una semana muy dura, de ello (del trato) hablaremos más adelante, con la cabeza más fría".

Alrededor de 10 compañeros, la mayoría de ellos españoles, se dieron cita en Iztapalapa para recibir a sus compatriotas. "Queremos agradecer el apoyo que recibimos en México y España, gracias a ello las cosas se dieron bien. Estar encerrado a en la calle es un cambio importante, por ello agradecemos el apoyo."

Los cuatro liberados tuvieron que atender decenas de llamadas a los teléfonos móviles de sus amistades: amigos, familiares y conocidos (en México y España) se comunicaron con ellos para saber de su situación y su estado físico y emocional.

Quizás el único inconveniente físico lo presentó Laia Serra, quien tenía la mano derecha lastimada, debido a que durante un partido de básquetbol en la estación migratoria se lesionó los dedos.

Los catalanes decidieron analizar más a fondo su caso y hablar primero con sus abogados antes de declarar sobre si entablarán una posible demanda por lo que les sucedió y sobre su propio proceso judicial. "Estamos desinformados, nuestra situación no está clara, entonces no podremos decir nada hasta tenerlo todo en más orden", señaló Sesén.

Mediante un comunicado el INM informó que levantó el aseguramiento a los cuatro españoles "una vez que se pudo comprobar su ingreso legal a territorio nacional, a través del Sistema Integral de Operación Migratoria, de los expedientes migratorios que obran con motivo de la emisión de las FM3 y de la verificación de las FMT que les fueron proporcionadas".

Los extranjeros fueron detenidos el pasado 5 de agosto en Oaxaca, con el argumento de que estaban escandalizando en la vía pública. "Es mentira lo que dicen los policías, andábamos por la calle y nos agarraron sin decir nada", precisó Sesén.

Luego de que no pudieron acreditar su legal estancia en el país ante el juez de Oaxaca (debido a que los policías que los detuvieron no les regresaron sus pertenencias, entre ellas documentación, como manifestaron los españoles hace unos días a este diario por conducto de un testimonio escrito), se les remitió a la estación migratoria de Oaxaca, para posteriormente ser conducidos, el 7 de agosto, a la ciudad de México, donde aseguró el INM, se les dio un "buen trato, apegado a derechos humanos" en la estación migratoria de Iztapalapa.

"El INM ha actuado en todo momento con estricto apego a derecho, de acuerdo a las atribuciones que le confiere la Ley General de Población y con pleno respeto a los derechos humanos de los españoles, quienes recibieron un buen trato durante su estancia en la estación migratoria", concluyó la dependencia.

 
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