Accesorios de Barbie y el carrito Sargento, de Cars, entre los que ponen en riesgo a niños
Mattel retirará del mercado otros 19 millones de juguetes
El fabricante chino de la empresa estadunidense usó pintura con altos contenidos de plomo
Ampliar la imagen Un empleado retira juguetes de Polly Pocket en una tienda de Richmond, Virginia, luego de que Mattel anunció que constituyen un riesgo para los niños por su alto contenido de plomo Foto: Ap
Nueva York, 14 de agosto. Corporación Mattel, la mayor compañía de juguetes de Estados Unidos, anunció hoy que retirará del mercado mundial cerca de 19 millones de sus productos fabricados en China, después de detectar que suponen un grave riesgo para los niños que juegan con ellos.
Esta es la segunda ocasión en menos de dos semanas que la compañía tiene que sacar de los aparadores millones de sus artículos, ya que el 2 de agosto pasado retiró de la venta -por la misma razón- un millón y medio de juguetes basados en los personajes de Plaza Sésamo y Dora la Exploradora, vendidos por su subsidiaria Fisher Price. Ese retiro significó el mayor realizado por una compañía desde 1998, cuando Mattel canceló la distribución de 10 millones de vehículos de juguete Power wheels, con lo que perdió 30 millones de dólares.
Esta nueva decisión de sacar sus productos de los escaparates costó a Mattel una caída de 6 por ciento en la Bolsa de Nueva York. Solamente hoy, sus acciones en Wall Street bajaron 2.4 por ciento.
En un comunicado divulgado esta mañana, la empresa informó que entre los juguetes que retirará de los escaparates del mundo están más de 400 mil carritos que representan al personaje Sargento, de la cinta de dibujos animados Cars, ya que la pintura con la que están decorados "contiene niveles inadmisibles de plomo" y puede producir daño cerebral en los niños.
Batman, de los peligrosos
La compañía también anunció que sacará de circulación otros 18 millones de artículos, entre ellos varios accesorios de su popular serie de muñecas Barbie y de los juguetes de Batman, los cuales contienen pequeños imanes muy poderosos que pueden ser ingeridos por los menores. Según la Comisión de Seguridad del Consumidor estadunidense (CSC), "si alguien se traga más de un imán, estos se atraen entre sí y provocan un bloqueo o una perforación intestinal". De hecho, la misma dependencia informó que ya habido tres casos de menores que tuvieron que ser operados por esta razón.
Según explica el comunicado de la compañía, sus inspectores de calidad descubrieron que la empresa china Early Light Industrial, que fabricaba los carritos Sargento, subcontrató la decoración de estos a la empresa Hong Li Da, también china. Esta, por su parte, en vez de usar la pintura de Early Light, la compró a un tercer proveedor que no estaba autorizado por Mattel, y que contenía altas cantidades de plomo.
El director ejecutivo de la compañía juguetera, Robert A. Eckert, advirtió de que "hay 72 artículos producidos entre 2002 y 2006 que deberán ser retirados", aunque explicó que, en el caso de los imanes, "no se trata de un defecto de fabricación, son las normas las que cambiaron".
Sin embargo, la presidenta en funciones de la CSC, Nancy Nord, estimó que el nuevo retiro no fue suficientemente grande como para prevenir más problemas con los juguetes, y que "no hay absolutamente ninguna excusa" para que productos que presentan estos inconvenientes sean vendidos en Estados Unidos.
Empresario chino se suicida
Aunque hasta ahora no se ha reportado ninguna víctima por jugar con estos carritos o con los productos de Fisher Price que salieron del mercado el 2 de agosto, el escándalo ya cobró una vida. El sábado pasado, el copropietario de Hong Li Da, Zhang Shuhong, se ahorcó en su fábrica tras enterarse de que su compañía era responsable de que estos juguetes tuvieran plomo y de que el gobierno le había prohibido exportar.
Según el diario neoyorquino The Wall Street Journal, algunas informaciones apuntan a que Zhang compró la pintura problemática a uno de sus amigos más cercanos. "Nuestro jefe fue arruinado por su mejor amigo", dijo uno de los empleados de Hong Li Da, según el rotativo.
No es la primera vez que centenares de miles de productos chinos tienen que ser retirados del mercado. A principios de este año, varios perros y gatos murieron por consumir comida para mascotas proveniente del gigante asiático, en la que se encontraron varios aditivos químicos no aptos para su consumo.
La primavera pasada, el gobierno de República Dominicana tuvo que sacar de los escaparates de farmacias y supermercados más de 35 mil tubos de pasta de dientes chinos que contenían un disolvente industrial.
Ese mismo ingrediente fue vendido a un laboratorio panameño que, pensando que se trataba de glicerina, como indicaba la etiqueta y la orden del pedido, lo mezcló con jarabe para la tos. Más de un centenar de personas murió por ese fraude.