El hambre y la ignorancia ponen en entredicho la democracia, advierte Vázquez Mota
Sin reforma fiscal, imposible el cambio en la educación: SEP
Firman convenio de colaboración el INEA y la Asociación Mexicana de Bancos de Alimentos
Ampliar la imagen La titular de la SEP, Josefina Vázquez Mota, y la directora del Instituto Nacional para la Educación de los Adultos, María Dolores del Río, durante la firma del convenio con la Asociación Mexicana de Bancos de Alimentos Foto: Notimex
El hambre y la ignorancia ponen en entredicho la gobernabilidad democrática, advirtió la titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Josefina Vázquez Mota, quien consideró que la reforma hacendaria es fundamental para “hacer posible” la otra transformación, que es “la más urgente”: la educativa.
Así, advirtió que “en tanto no resolvamos los rezagos y la calidad, no daremos tregua y no descansaremos en esta reforma, en la que millones de mexicanos coinciden”.
Durante la firma del convenio de colaboración entre el Instituto Nacional para la Educación de los Adultos (INEA) y la Asociación Mexicana de Bancos de Alimentos (AMBA), reiteró que el fanatismo no es una enfermedad incurable, porque puede contrarrestarse con la educación, la tolerancia, el respeto y la no discriminación.
Manifestó que el tamaño de la apuesta educativa es tal que se requiere no sólo de voluntad política, sino de una visión de largo plazo y de una política de Estado.
“Más allá del saber”
El reto de la enseñanza –insistió– va más allá del saber, porque también convoca a la superación de la pobreza y la ignorancia, que son dos caras de la misma moneda.
“El hambre y la ignorancia fracturan la convivencia civilizada y ponen en entredicho la eficacia de la vida institucional y la gobernabilidad democrática”, sostuvo.
En el auditorio Miguel Hidalgo del edificio de la SEP, la funcionaria destacó que el rezago educativo es un círculo perverso que ha orillado también a la pobreza alimentaria. Y habló de las consecuencias que trae consigo la ausencia de la formación, como no saber escribir el nombre propio o no romper las ligas de la dependencia.
Vázquez Mota retomó el discurso de que sin la reforma hacendaria que promueve el gobierno federal no será posible tener los apoyos requeridos para otras transformaciones. “Para una reforma tan urgente como la educativa, habremos de necesitar más recursos, más posibilidades de infraestructura. De ahí el afán de Felipe Calderón en promover esta reforma hacendaria, tan definitiva para hacer posible ésta, la más urgente: la reforma educativa del país”.
En relación con el convenio, dijo que éste contribuirá a resolver las dos caras de un mismo problema: el hambre de alimento y el hambre de educación.
Explicó que en una primera etapa, se brindarán servicios de enseñanza a 70 mil beneficiarios de los bancos de alimentos en Monterrey, Saltillo, Reynosa, León, Los Mochis, Morelia, Mérida, Tuxtla Gutiérrez, Jalapa y el Distrito Federal.
En presencia de la señora Elena Hernández Gómez, beneficiaria del Banco de Alimentos y quien ayer recibió su constancia de secundaria, junto con otros adultos, Vázquez Mota resaltó el esfuerzo, pero también habló de las tareas que restan por hacer en el sector.
Al tomar el micrófono, Elena Hernández Gómez narró que al salir de la primaria no pudo continuar con sus estudios por falta de dinero, pero desde que se empeñó en contar con la formación básica ha podido enseñar a leer y escribir a personas que la rodean en una comunidad de alta marginación en Jalisco.
El presidente de la AMBA, Luciano José Aimar Reyes, señaló que esa asociación es la segunda red de bancos de alimentos más grande del mundo, y expresó su confianza en que este convenio no será un documento de escritorio, sino de acciones concretas para apoyar a los beneficiarios.
En la ceremonia, 20 ciudadanos recibieron sus constancias de alfabetización, así como certificados de primaria y secundaria.