Millones de estadunidenses creen que trabaja para la DEA o que fue abducido por extraterrestres

Elvis, 30 años de nostalgia

El Rey del rock, un fenómeno de la mercadotecnia; generó 48 mdd el año pasado

AGENCIAS

Hoy se cumplen 30 años de la muerte del Rey del rock, Elvis Presley, quien con su música y sus movimientos de cadera sensuales logró extasiar a las masas y se convirtió en el representante germinal, en la quintaesencia de lo que debe ser exactamente una estrella de rocanrol. Después de haber gozado de una vida de fama, éxito y glamur, el 16 de agosto de 1977 murió en su casa después de ingerir 14 estupefacientes distintos. El cantante pesaba 130 kilos, tenía problemas respiratorios y se había entregado por completo a una vida de excesos, al grado de rozar la demencia.

Pero una leyenda del rock como él no puede morir, al día siguiente de su deceso comenzó el mito, pues se han reportado apariciones de él en prácticamente todos los rincones del planeta: a fines de los años 80 fue visto en Kalamazoo, Michigan, comiendo una hamburguesa. Esa leyenda urbana, lanzada entonces por el tabloide estadunidense Weekly World News, recorrió rápidamente todo el planeta y desde entonces las visiones del Rey del rock no han hecho más que sucederse.

Algunos lo han visto en una casa rodante en Louisiana; en Osaka, Japón, tomando cursos de danza del vientre; en la República Checa conduciendo un tranvía, o comprando zapatos de gamuza azul en Gran Bretaña.

Pero el testimonio que más se repite en innumerables sitios consagrados a las apariciones de Elvis se refiere a encuentros en cadenas de comida rápida en todos los rincones del planeta, desde Sydney hasta Los Angeles, pasando por Bruselas y Kalamazoo.

No hay pruebas ciertas, pese a una recompensa de 3 millones de dólares ofrecida a quien pueda aportar elementos concretos de que Elvis aún vive.

Los adeptos a la teoría del complot defienden versiones de todo tipo para explicar que Elvis habría simulado su propia muerte. Algunos afirman, por ejemplo, que la leyenda del rock se beneficiaría del programa de protección de testigos y trabajaría para la agencia estadunidense de lucha contra la droga (DEA, por sus siglas en inglés). Por eso, tendría que viajar por todo el mundo, lo que explicaría todas estas visiones.

Tampoco faltan quienes plantean la hipótesis de un secuestro extraterrestre o quienes dan rienda suelta a su imaginación: un fanático británico está firmemente convencido que tras una experiencia de clonación, existen en realidad miles de Elvis. Explica que uno de ellos le contó que cada clon podía ser el Rey durante un día, pero que debido a un retraso de los clones del 15 y 16 de agosto de 1977, el clon del 14 de agosto quiso quedarse más tiempo y sufrió un fin trágico. Los miles de clones restantes se reconvirtieron entonces como sosias.

Y hay un último indicio. El nombre de Elvis es el anagrama de "Lives": él vive.

Lo cierto es que a 30 años de su muerte Elvis factura más dinero que lo que recaudó en la cúspide de su carrera, un icono que convierte en oro todo lo que toca, desde esculturas de cerámica hasta ropa interior, café o vino con su marca. Su rostro, su cabello, sus trajes y su postura son reconocibles de inmediato y adornan todo lo imaginable... y a veces cosas increíbles.

Con licencia para todo

Un centenar de comerciantes reunidos en una exposición propone esta semana en Memphis todo tipo de objetos a los fanáticos que han llegado desde todas partes del mundo para rendir tributo al Rey.

Elvis Presley Enterprises recaudó 48 millones de dólares el año pasado, de los cuales unos 13.6 millones son producto de licencias. Se estima que esa cifra podría multiplicarse bajo la administración de Robert Sillerman, quien compró en 2005 una participación del 85 por ciento.