Llama legislador local a despolitizar el proyecto para conocer sus bondades o desventajas

PRD-DF pide a la Asamblea crear comisión que analice factibilidad de la megatorre

Acusa Carlos Reyes a Gabriela Cuevas de favorecer a empresarios que la apoyaron en campaña

rocio gonzalez, raul llanos

Ante la “manipulación y las mentiras” que ha orquestado la jefa delegacional en Miguel Hidalgo, Gabriela Cuevas Barrón, en contra de la construcción de la llamada Torre Bicentenario, el PRD capitalino solicitará a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) la integración de una comisión especial para que analice la factibilidad de este proyecto y lleve a cabo un referéndum con el propósito de conocer la opinión de la ciudadanía al respecto.

Ante esa propuesta, el presidente de la Comisión de Desarrollo e Infraestructura Urbana de la ALDF, el perredista Edy Ortiz, consideró que un primer paso para conocer las bondades o desventajas del proyecto de la torre es “despolitizarlo”. Calificó además de inviable el planteamiento perredista, pues en el órgano legislativo ya existe una comisión específica –la que preside– que tiene la facultad para analizar detalladamente el expediente que envíe el gobierno de la ciudad solicitando el cambio de uso de suelo en las Lomas de Chapultepec para edificar dicha obra.

Por la mañana, el secretario general del PRD-DF, Carlos Reyes Gámiz, ofreció una conferencia de prensa en la que dio a conocer su propuesta, y de paso detalló que, paralelamente, el partido conformará un consejo técnico asesor con especialistas en materia urbana, que los asista en la organización de foros y mesas de trabajo para establecer los pros y contras de la Torre Bicentenario.

Añadió que también se contempla promover una “eco auditoría”, que podría ser realizada de manera conjunta por las secretarías de Medio Ambiente federal y local, para analizar la sustentabilidad de este proyecto en el marco de la “Agenda XXI” que signó el gobierno capitalino con la ONU en materia ambiental.

Gámiz, quien estuvo acompañado del secretario de Comunicación Social, Adrián Bejerano, y el Oficial Mayor del PRD-DF, Marcelino Castañeda, aclaró que la intención del sol azteca no es defender o avalar esta iniciativa del sector privado, sino abonar al debate actual los argumentos necesarios y evitar que sea objeto de “ataques e infundios”, como las que ha orquestado Gabriela Cuevas.

Sostuvo que detrás de la oposición de la jefa delegacional en Miguel Hidalgo al edificio que sería el más grande de América Latina no está el interés legítimo del entorno urbano y la calidad de vida de los habitantes, sino el de beneficiar sólo a un grupo de desarrolladores con los que hizo una serie de compromisos.

Muestra de ello, abundó, está la gran edificación que se realiza en Mariano Escobedo y Lago Alberto, propiedad de uno de los constructores más importantes del país, que goza de la simpatía de Cuevas Barrón “por los millones de pesos con los que le ayudaron en su campaña”, pues no tiene ningún tipo de estudio de factibilidad.

Dijo que si se tratara de dirimir en la calle la factibilidad de este proyecto, como lo hace actualmente la panista, el PRD junto con las organizaciones ciudadanas a las cuales se encuentra vinculado podría hacer una manifestación en favor de la Torre Bicentenario con un número mayor de participantes que los congregados en el cordón humano realizado el sábado pasado.

Respecto al tema, el diputado Edy Ortiz detalló que si bien ha sostenido reuniones con el secretario de Desarrollo Urbano del GDF, no han sido para analizar específicamente la propuesta de cambio de uso de suelo que deben enviar a la ALDF.

Entonces, dijo el perredista, lo que tenemos “es un falso debate”, porque hasta ahora no han entregado nada a los legisladores y por tanto no se conoce la propuesta de redensificación o lo relativo al impacto urbano y ambiental, y es lógico que ahí debe haber un apego total a las normas vigentes.

Lo que sí, dijo, es que una vez que reciban la propuesta del GDF convocarán no sólo a vecinos, sino a especialistas en la materia, de los colegios de ingenieros, arquitectos, urbanistas, ambientalistas, para que den una opinión sustentada y no sólo opiniones políticas.