Carece de reglas a 10 años de creado: González de Aragón
Reprocha ASF al gobierno vacío legal en el ramo 33
El titular de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), Arturo González de Aragón, recriminó al gobierno federal que a 10 años de haber surgido el ramo 33 –integrado por siete fondos presupuestales para apoyar el rezago social en todos los estados– no se han determinado las reglas de operación para el ejercicio de esos recursos ni actualizado los objetivos que los rigen, con lo que “está en grave falta”.
En un foro sobre fiscalización organizado por la Asamblea Legislativa capitalina y la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el servidor público aseguró que los siete fondos que integran este ramo –entre otros el FAIS, Fortamun y FAM, y en la mayoría de los cuales se incluye al Distrito Federal– tampoco han sido sometidos, desde su creación, en 1997, a una evaluación crítica que actualice y reoriente las estrategias que los forman.
Frente a académicos, estudiantes, funcionarios, especialistas en fiscalización y diputados locales, expresó que es fundamental establecer las reglas de operación del ramo 33 para su ejercicio y actualizar sus objetivos. “Es increíble que después de 10 años, aún no se emitan estas reglas”, remarcó.
En el amplio discurso que ofreció en la aula Jacinto Pallares de la Facultad de Derecho de la UNAM, el auditor añadió que de las “debilidades” que han sido detectadas tanto en la operación de esos fondos como en su distribución y aplicación está el hecho de que llegan a representar una proporción reducida respecto del monto de los ingresos propios de las entidades.
Existen, dijo, tendencias importantes de concentración de recursos en las cabeceras municipales. Añadió que debido a la falta de disposiciones sobre la anualidad del gasto, “existe un desfasamiento en el ejercicio de los recursos”.
Citó, entre otros puntos, que “la difusión de la aplicación de los recursos, así como de las acciones y resultados alcanzados en la operación de los fondos, observa muy poco avance, afectando la transparencia de su manejo, aunado al hecho de que la Ley de Coordinación Fiscal no prevé indicadores de resultados que permitan realizar la evaluación de las acciones”.
Frente a esa situación, González de Aragón enumeró 10 acciones que contribuyan a hacer eficiente el manejo de esos recursos presupuestales, como el promover ante el Legislativo un estudio de gran alcance sobre los fondos, que permita mejorar la Ley de Coordinación Fiscal; definir mecanismos que privilegien el principio de equidad; revisar la fórmula de su distribución para premiar la eficiencia y la transparencia en su aplicación, y regresar al esquema que fue eliminado del presupuesto de egresos federal de 2007, que es operar cuentas bancarias únicas para el manejo de los citados recursos.
Durante el foro intervino el contador mayor de Hacienda de la Asamblea Legislativa del DF, David Vega Vera, quien destacó la necesidad de autonomía total a este órgano de fiscalización, para que no dependa técnica ni presupuestalmente de ninguna otra instancia, lo que evitaría estar sujeto a vaivenes políticos o intereses de diputados y partidos, y así consolidar la confiabilidad de los capitalinos en su tarea.