Exhibe y vende réplicas de espejos del siglo XVIII
La fundación Rodolfo Morales lanza plan contra la migración
Una colección de réplicas de los espejos del siglo XVIII y sus marcos, encontrados en la iglesia de Santa Ana Zegache, Oaxaca, reproducidos en los talleres comunitarios de la Fundación Cultural Rodolfo Morales, se exhibirán hasta el 31 de agosto en el Centro Cultural Atrio (Orizaba 127, colonia Roma). Con su venta se apoyará a los habitantes de la región para frenar su migración a Estados Unidos.
El pintor Rodolfo Morales (1925-2001), nacido en Ocotlán, concibió la fundación para rescatar el patrimonio artístico, ecológico e histórico de su estado, y generar también fuentes de trabajo dentro de las mismas comunidades.
Como parte de las actividades de la fundación se emprendió la restauración de iglesias, entre ellas la de Santa Ana Zegache, una comunidad del municipio de Ocotlán, cuyo templo del siglo XVII posee pintura mural y 12 retablos de estilo barroco, llevados allí con posterioridad.
De acuerdo con Georgina Saldaña, coordinadora de los talleres comunitarios, en la primera etapa de restauración de la iglesia se rescató la parte arquitectónica. En un principio se creó un grupo de 10 jóvenes de la comunidad, "buenas bordadoras", para formar los talleres de restauración de pintura mural.
Aprendieron a aplicar hoja de oro. En ese momento, Santa Ana Zegache era un pueblo "femenino", porque los hombres se habían ido a Estados Unidos, expresa la restauradora, aunque con el tiempo se ha convertido en un pueblo de la tercera edad, debido a que ahora se van familias enteras y jóvenes que apenas terminan la secundaria. De hecho, en el estado de Oregon hay un pueblo que se llama Santa Ana Chiquito, porque los zegachecos viven allí.
Objetivo original del taller
Luego del fallecimiento de Morales, los talleres se cerraron por falta de recursos. La idea del pintor, explica la entrevistada, era crear fuentes de empleo, "enseñar a los jóvenes el oficio de la restauración, así como otros, entre los que destacan la aplicación de la hoja de oro, talla en madera, vitrales, hierro forjado... oficios perdidos que el maestro quería recuperar para evitar la migración".
La Fundación Alfredo Harp Helú apoyó en la restauración de primer retablo y la Fundación Rockefeller en la recuperación del segundo, que es de la Virgen de Guadalupe y comprende un cuadro de Miguel Cabrera. Dado el interés que los visitantes han mostrado por los espejos, se concibió un proyecto para realizar un centenar de reproducciones, con sus marcos dorados, policromados y plateados. Para esto se convocó a 14 jóvenes para aprender a hacer los espejos en nueve diseños diferentes.
También tienen un proyecto con el espacio cultural La Curtiduría y Demián Flores, para que 25 artistas pinten igual número de marcos para los espejos, pero con una visión más contemporánea. Entre los artistas participantes están Francisco Toledo, Sergio Hernández, Guillermo Olguín, Mauricio Cervantes, Fernando Aceves, Gabriel Macotela, Boris Viskin, Gustavo Monroy, los hermanos Castro Leñero, Irma Palacios y Jan Hendrix.
Una vez terminadas, las obras serán vendidas para que los muchachos no tengan que migrar. "Si en algún momento los integrantes del taller migraran, por lo menos ya tienen un oficio, ya saben hacer algo más prometedor", concluye Saldaña.