Confiscan a supuestos militantes islámicos explosivos como los usados en atentados de Madrid
Frustra Alemania ataques con bombas contra instalaciones de Estados Unidos
“Un horrible acto fue evitado”: Angela Merkel
Una base militar, entre los objetivos
Ampliar la imagen Imágenes de los tres hombres detenidos por las autoridades alemanas, a quienes se acusa de planear ataques masivos con bombas contra instalaciones estadunidenses en el país europeo. Dos son de nacionalidad alemana y el otro turco Foto: Reuters
Berlín, 5 de septiembre. Los servicios de seguridad de Alemania frustraron un plan de presuntos militantes islámicos, a quienes acusaron de pretender realizar “ataques masivos con bombas” contra instalaciones de Estados Unidos en este país, y arrestaron a tres sospechosos.
La fiscal federal Monika Harms declaró que los hombres, dos de nacionalidad alemana y un turco, estaban a punto de perpetrar sus ataques luego de adquirir suficiente material para hacer una bomba.
Se trata de 12 contenedores con un total de 735 kilos de peróxido de hidrógeno, sustancia utilizada en los atentados de Madrid ocurridos el 11 de marzo de 2004, con los que se podían confeccionar cargas explosivas equivalentes a unos 550 kilogramos de TNT, cuyo “efecto iba a ser peor que en los ataques de Madrid y Londres, en 2005”, agregó Harms. Los fiscales identificaron a los sospechosos como Fritz G. y Adem Y., ambos de 28 años, y Daniel S., de 21.
Los hombres fueron arrestados el martes, el mismo día en que la policía de Dinamarca capturó a ocho jóvenes musulmanes bajo sospecha de planear un ataque, y una semana antes del sexto aniversario del atentado del 11 de septiembre de 2001 en Estados Unidos.
Las investigaciones de la justicia y de la policía involucraron a otras siete personas, cinco de las cuales ya fueron identificadas.
El ministro de Defensa alemán, Franz Josef Jung, dijo que los sospechosos suponían una amenaza “inminente” a la seguridad, mientras la canciller federal, Angela Merkel, declaró que un “horrible acto” fue evitado.
Las autoridades aseguraron que “en ningún momento hubo un peligro inmediato para la población”, pero no pudieron confirmar informes respecto a que los sospechosos tenían como objetivos el aeropuerto internacional de Francfort y una importante base militar de Estados Unidos en Ramstein.
Los acusados fueron llevados ante el juez de instrucción del Tribunal Supremo Federal, donde se informó que pertenecerían a un grupo sunita poco conocido afiliado a Al Qaeda y con raíces en Uzbekistán, llamado Unión de la Jihad Islámica. Se cree que fueron entrenados en campos para militantes, en Pakistán.