Perdió 5 mil millones de pesos en los seis años anteriores, señala el titular de Finanzas
Recibe DF trato discriminatorio en reparto de recursos federales
Rechaza Delgado Carrillo que se vayan a cancelar obras en marcha o programas sociales
Ampliar la imagen El secretario de Finanzas, Mario Delgado Carrillo, participó ayer en un foro sobre reforma fiscal y organizaciones sociales Foto: José Antonio López
En los seis años anteriores, el Gobierno del Distrito Federal perdió 5 mil millones de pesos a causa de un tratamiento discriminatorio en la distribución de las transferencias federales, tendencia que continuará el año próximo y representará una merma adicional de 3 mil 600 millones, informó el secretario de Finanzas, Mario Delgado Carrillo.
La fórmula utilizada en el Fondo General de Participaciones, aplicada desde 1990 a la fecha, ha reducido de 20 a 11 por ciento, en términos reales, los recursos destinados a los diversos fideicomisos a que tiene acceso la ciudad y desaparecido otros, como el de para infraestructura en los estados (FIES).
La determinación por ello de blindar las finanzas de la capital, pues como está planteada la reforma fiscal “todos tendremos más recursos, pero proporcionalmente vamos a recibir menos”, dijo el funcionario al rechazar la posibilidad de que se cancele alguno de los programas sociales en marcha u obras de infraestructura, agua o transporte a realizar por la administración actual.
El manejo responsable de los recursos y la recuperación de los adeudos pequeños y grandes ha permitido un ingreso adicional a las arcas públicas y permitido la identificación de 15 grandes empresas (de las cuales rechazó proporcionar sus nombres) que no pagan impuestos, mismas que se les solicitará ponerse al corriente.
Al término de su participación en el foro La reforma fiscal y las organizaciones de la sociedad civil, donde estuvo acompañado por el secretario de Desarrollo Social, Martí Batres, explicó que las distintas ponderaciones realizadas por la Secretaría de Hacienda para la distribución del Fondo General de Participaciones, sobre todo la del aspecto poblacional, ha repercutido en una “baja continúa de los recursos a la ciudad”.
Sólo en los seis años recientes la pérdida asciende a 5 mil millones de pesos, a la cual se sumarán 3 mil 500 pesos por la reducción de un punto porcentual ante la caída en los ingresos petroleros. Sus efectos se observaron ya en el primer semestre del año al recibir 16 mil millones de la bolsa general de participaciones, contra 34 mil millones durante 2006.
“No podemos permitir que eso suceda. No podemos seguir reduciendo la participación de la ciudad en el pacto fiscal porque somos uno de los grandes recaudadores de IVA, ISR y activo, aportando en promedio 50 por ciento de la recaudación total nacional. Y el trato que recibimos en el pacto fiscal es muy injusto porque se considera una población de 8 millones, pero damos servicio a 16 millones”, argumentó.
La paradoja de esto es que la fórmula con base en la población ya no funciona para distribuir recursos y debería considerar un trato especial para las zonas metropolitanas, a fin de que sea una situación más equitativa de los recursos, dijo tras rechazar la reforma fiscal presentada por el gobierno federal.
Delgado coincidió con Martí Batres en que dicha propuesta grava a la población de menos ingresos y asegura los privilegios de salarios altos en la administración federal, la cual tiene muchas opciones para obtener recursos, pero se ha propuesto, de manera equivocada e injusta, nuevos impuestos que destruirán el tejido social.
Por ello, dijo, la determinación del Gobierno del Distrito Federal de mantener su programa de exención de impuestos, como el predial, a organismos no gubernamentales e instituciones de asistencia privada, a fin de atender las necesidades de los que menos tienen; y dar facilidades para dictaminar sus ingresos o egresos y tengan un acceso más rápido a esos beneficios.
Las autoridades federales, consideraron ambos funcionarios, debe revisar en qué está gastando, antes de pretender incrementar los impuestos, porque “sí se puede hacer las cosas diferente”, y prueba de esto es que en los años recientes el gobierno capitalino obtuvo 10 mil millones de pesos anuales por medio de su programa de austeridad, el cual puede ser aplicado también en el ámbito federal.