Llama a participar en la redacción de la Constitución local para presentarla el año próximo
Libertad e igualdad, causas a las que debemos ser leales, asegura Ebrard
Ampliar la imagen Marcelo Ebrard y su esposa encabezaron los festejos en el antiguo ayuntamiento Foto: Francisco Olvera
Al restablecer para la ciudad de México la ceremonia conmemorativa del inicio de Independencia, el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard Casaubon, reivindicó el derecho de la entidad a decidir su propio destino, y convocó a la los capitalinos y a los poderes Legislativo y Judicial a participar en la redacción de una Constitución local, para presentarla el próximo año.
Indicó que las causas esenciales de los insurgentes fueron dos: libertad e igualdad, y esas son las que identifican su programa de gobierno, y el mejor homenaje que se puede hacer a quienes iniciaron el movimiento libertador es ser leales a esos principios, traduciéndolos en políticas públicas.
“Se busca que haya igualdad de derechos como fundamento, como base de relaciones políticas institucionales favorables a la ciudad y que partan del supuesto de que la capital ha elegido a su gobierno y que su programa no esté sujeto a ninguna otra condición más que el mandato que hemos recibido y que es el que vamos a acatar durante los seis años de gobierno”, expresó.
Ayer, la apertura al público del edificio del Antiguo Palacio del Ayuntamiento y su salón de cabildos, desde las 15:30 horas, añadió un nuevo atractivo a las fiestas patrias en el Zócalo –a diferencia del inaccesible Palacio Nacional–, al que llegó la gente a pesar de que las críticas del mandatario capitalino contra el operativo que comenzó a montar desde hace una semana el gobierno federal no impidieron que ayer toda la plancha del Zócalo y sus accesos fueran cercados y militarizados por el Estado Mayor Presidencial.
Los patios oriente y poniente del histórico inmueble que en sus inicios, desde el sigllo XVI, fue tienda, cárcel, carnicería mayor y alhóndiga, fue semidestruido en un motín de indios contra el virrey en 1692, y desde 1997 alberga la sede de la jefatura de Gobierno, se transformaron en salas de estar con sillas y mesas, mientras que sus muros fueron decorados con luces y pendones tricolores; allí la gente pudo descansar y degustar bocadillos mientras bebía agua de tamarindo y escuchaba a un grupo de guitarras y violines.
Como hace 181 años por primera vez y 79 por última ocasión, el salón de cabildos del Antiguo Palacio del Ayuntamiento volvió a ser testigo de una sesión solemne que congregó, además de los funcionarios del gabinete y a los de la pasada administración que hoy forman parte del “gobierno legítimo” de Andrés Manuel López Obrador, como Bernardo Bátiz, José Agustín Ortiz Pinchetti, Asa Cristiana Laurel, Martha Pérez Bejarano y Laura Itzel Castillo, junto con diputados locales, el presidente de la Comisión de Derechos Humanos local, Emilio Alvarez Icaza, y del Tribunal Superior de Justicia, José Guadalupe Carrera, mientras que la gente colmó los patios en el momento de la ceremonia, acompañando las palabras del jefe de Gobierno con trompetas y aplausos.
El acto central lo inició el presidente de la Comisión para los Actos Conmemorativos del Bicentenario de la Independencia y el Centenario de la Revolución, Enrique Márquez, narrando el episodio de la captura y disolución del primer movimiento independentista encabezado por Francisco Primo de Verdad y Ramos.
En tanto, la Secretaría de Cultura capitalina, con su programa de actividades, devolvió también a la Alameda Central parte del protagonismo que tenía en las fiestas patrias como el sitio que originalmente convocaba a la gente para celebrar. En el Hemiciclo a Juárez se montó un “cuadro viviente de la Independencia” con actores caracterizando a los personajes clave del movimiento insurgente: Hidalgo, Guerrero, Matamoros y Allende.
Ebrard, anoche, no dejó pasar la ocasión para pronunciarse en contra de la cuasimilitarización del Zócalo: “no se puede seguir pensando el futuro de México asumiendo la subordinación de la ciudad y de sus derechos como condición, y eso es lo que estamos viviendo el día de hoy”, señaló.