Los apoyos se concentran en agroempresas y en personas de altos ingresos, denuncian
Desmienten labriegos que la Sagarpa haya aumentado créditos a productores
Aconsejan al gobierno no dar la espalda al campo para que se mantenga en paz social
La Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) afirmó que los créditos a la producción agrícola y pecuaria registraron un incremento de 17.8 por ciento en el primer semestre del año, en comparación con el mismo periodo del año anterior. Sin embargo, dirigentes de organizaciones campesinas negaron dicha situación y sostuvieron que los financiamientos y apoyos se han concentrado en agroempresas y en productores de altos ingresos.
Según la Sagarpa, mediante Fideicomisos Instituidos en Relación con la Agricultura (FIRA) se colocaron créditos por 11 mil 143 millones de pesos, es decir, mil 686 millones de pesos más que en el mismo periodo de 2006, y además se redujeron 23 por ciento los créditos a los grandes productores, quienes son atendidos por la banca comercial. Por ello en el primer semestre de este año los créditos a ese grupo de productores disminuyeron de 18 mil 421 millones de pesos otorgados el año pasado, a 14 mil 163 millones de pesos.
Agregó que la Financiera Rural también mostró ligero incremento en el otorgamiento de créditos agrícolas, al pasar de 3 mil 420 millones de pesos en 2006 a 3 mil 741 millones en el primer semestre de este año. Los préstamos para otros rubros de la agricultura pasaron de mil 833 a mil 957 millones de pesos en dicho periodo, es decir, un incremento de 6.7 por ciento.
Sin embargo, la dirigencia nacional de la Alianza Nacional de Productores Agropecuarios y Pesqueros-El Barzón asentó que la reducción del financiamiento al sector agropecuario fue de 56 por ciento, pero también se redujeron los créditos de la banca comercial a las empresas, de 27 por ciento en 1998 a 18.2 a marzo de este año; la banca extranjera también redujo su aportación al pasar de 9.6 a 1.7 por ciento, y la banca de desarrollo de 4.3 a 1.6 por ciento; en el caso de las empresas con ventas inferiores a 100 millones de pesos, tienen que afrontar una disminución de 7.7 puntos porcentuales en el financiamiento otorgado por la banca comercial, al ubicarse en apenas 16.2 por ciento.
La situación es delicada, asentaron los barzonistas, quienes también advirtieron de la reducción de las remesas, que estaban proporcionando recursos extraordinarios a la economía mexicana, pues representan en promedio 15 por ciento del total de los ingresos per cápita de las familias rurales. Agregaron que según cálculos de especialistas internacionales, las remesas constituyen más de 25 por ciento del capital invertido en al menos 6 mil 44 micro y pequeñas empresas.
De su lado, el dirigente de la Central Campesina Independiente, Rafael Galindo Jaime, aseguró que la mayor parte de los recursos del Procampo y de los programas de Alianza para el Campo se concentran en grandes agricultores; incluso ya el director del Procampo estudia la posibilidad de que los pequeños productores beneficiados con dicho programa sean trasladados al programa de Oportunidades de la Secretaría de Desarrollo Social.
Esa concentración, más la propuesta del gobierno de desparecer 14 programas para el sector rural y dejar un presupuesto de apenas 11 mil 656 millones de pesos al sector, demuestra que no hay interés del gobierno para el campo. Es lamentable que el gobierno por un lado diga que combate a la pobreza y por otro reduce los recursos orientados a la generación de empleos en regiones marginadas. “Es inadmisible que se deje sin una alternativa de empleo a cientos de jóvenes y se favorezca el crecimiento en el medio rural de productores ricos; hay una regresión social que debe cuidar el gobierno para sostener la paz en el campo”, acotó.