El ex presidente peruano, recluido en un cuartel policial luego de su retorno al país

Pedirá Perú a Chile ampliar los procesos de extradición de Fujimori

Anuncia hija del ex mandatario movilizaciones populares en favor de su padre en Lima y provincias

Decepción de unos 300 seguidores que lo esperaron infructuosamente en la base aérea de la policía

Afp, Dpa y Reuters

Lima, 22 de septiembre. El ex presidente peruano Alberto Fujimori llegó esta tarde a una base aérea de Lima a bordo de un avión Antonov de la policía peruana, y de inmediato fue trasladado en helicóptero a un cuartel del este de la ciudad, que será su primer sitio de reclusión tras ser extraditado de Chile.

Después de siete años de haber estado prófugo de la justicia peruana, el ex gobernante perdió la batalla ante la Corte Suprema de Chile, que la víspera aprobó su extradición para que responda por dos casos de violaciones a derechos humanos y cinco relacionados con hechos de corrupción.

El avión aterrizó en la base militar de Las Palmas, al sur de Lima, cerca de las 16.40 de la tarde, y fue llevado poco después al cuartel de la Dirección de Operaciones de la Policía, donde fue recibido por el ministro del Interior, Luis Alva Castro, dos funcionarios de la policía y un médico que certificará su salud.

Fujimori, que según imágenes de televisión no estaba esposado, sufrió algunos problemas de salud en el avión que lo trasladó de Santiago a Lima, con escalas en la ciudad chilena de Antofagasta y en la peruana de Tacna, ya que habría sufrido una descompensación.

El avión de la policía, que desde ayer había partido a Santiago para hacer el traslado, aterrizó sorpresivamente en el aeropuerto de la fuerza aérea, en el distrito capitalino de Santiago de Surco, despistando a unos 300 seguidores del ex mandatario que lo esperaban en el aeropuerto de la policía, al otro extremo de la ciudad.

Fujimori, quien gobernó durante dos periodos entre 1990 y 2000, permanecerá alrededor de dos o tres semanas en el cuartel policial en el distrito de Ate Vitarte, una zona pobre, un recinto que es la mayor sede de quema de drogas incautadas por la policía.

Allí tendrá una celda bastante amplia, dotada de dormitorio, baño y un pequeño estudio sin televisión, aunque la cadena CNN dijo que tendrá acceso a medios impresos. Los alimentos le serán suministrados por sus familiares.

Una vez que todo esté listo para el inicio del juicio, en las próximas semanas, será recluido en la escuela de agentes penitenciarios en el puerto de Callao, vecino de Lima, donde se habilitará una sala judicial para su procesamiento.

Trato digno, exige

Antes de su traslado a Lima, en Santiago, Fujimori declaró a la prensa que esperaba recibir en Perú un trato acorde a su condición de ex presidente de la república y ser sometido a debido proceso. Dijo que no hubo negociación, pero confiaba en que “obviamente” no sería llevado a una cárcel común por razones de seguridad.

El Chino, como se apodaba en su país al ex gobernante de 69 años, aseguró además que “habrá algún Fujimori presente en la próxima carrera presidencial”. Afirmó que sigue contando con “un respaldo mayoritario de una corriente popular muy fuerte, la que todo el mundo conoce, el fujimorismo, que continúa vivo”.

Perú anunció que solicitará a la Corte Suprema chilena la ampliación de los procesos de extradición del ex mandatario, ya que la autoridad peruana sólo podrá juzgarlo por los casos autorizados para la extradición.

“La autoridad chilena dirá si proceden o no las solicitudes de ampliaciones”, dijo la ministra de Justicia, María Zavala.

El canciller José García Belaúnde, quien excluyó a Japón de intervenir en este proceso, dijo que Perú enviará la próxima semana a Chile un nuevo pedido de extradición del acusado por homicidio en relación a la matanza de 42 internos, acusados de pertenecer a Sendero Luminoso, tras un motín carcelario en 1992.

Unos 300 simpatizantes de Fujimori se sintieron decepcionados porque no pudieron recibirlo, cuando lo esperaban con mariachis y la canción Y volver, volver.

Acusaron al presidente Alan García de lo sucedido y gritaron “no lo toquen”, en medio de algunos incidentes violentos que arrojaron al menos seis arrestados.

Keiko Fujimori, una de las hijas del detenido, dijo que habrá movilizaciones en todo el país ya que están fuertes, en alusión a su presencia en el Congreso, donde el fujimorismo tiene un pacto político con el oficialista Partido Aprista Peruano, que ahora estaría en riesgo de romperse.