Saboteó EU a la ex URSS con software defectuoso: Castro
El presidente de Cuba, Fidel Castro, publicó una más de sus Reflexiones del comandante en jefe, la serie de artículos que ha escrito desde que cayó enfermo y cedió el poder “de manera temporal” a su hermano Raúl, en julio de 2006.
El artículo, aparecido ayer pero fechado el 18 de septiembre, se titula “Mentiras deliberadas, muertes extrañas y agresión a la economía mundial”. Largo, como el resto de las reflexiones, por su extensión ocuparía cuatro páginas de este diario.
La información que contiene el nuevo texto está ampliamente extraída de los diarios de testigos privilegiados de la guerra fría, sean líderes de los bloques enfrentados en esa contienda o miembros de los servicios de espionaje. La mitad del artículo, por ejemplo, son citas textuales de un libro de la ex primera ministra británica Margaret Thatcher.
En esta nueva entrega de sus reflexiones, Castro habla de la importancia de la tecnología en la caída de la Unión Soviética, del espionaje entre los dos bloques enfrentados en la guerra fría y las posiciones de sus líderes.
El énfasis, sin embargo, lo pone sobre la forma en que Estados Unidos saboteó la infraestructura rusa y obligó a los países comunistas europeos a pasar largos periodos de austeridad gracias a la venta de software defectuoso.
Según el comandante, esos intercambios trucados dieron al gobierno de Ronald Reagan la posibilidad de apostar por el sistema de defensa espacial llamado popularmente guerra de las galaxias, un albur que el mandatario estadunidense sabía que ganaría gracias a que la tecnología que vendió a la URSS era defectuosa y a que la respuesta soviética sólo estaría a la altura del desafío si el pueblo ruso era sometido a una fuerte restricción económica.
“Acto de terrorismo”
Estas acciones, de acuerdo con Castro, “dañaron la economía y desestabilizaron al Estado” comunista. El presidente cubano concluye que fueron “un éxito rotundo”, pero que si hubieran sido los soviéticos quienes emprendieran esa campaña contra los estadunidenses “pudiera haberse visto como un acto de terrorismo”.
El líder cubano afirma que en el verano de 1981 el entonces presidente francés, François Miterrand, informó a su homólogo estadunidense Ronald Reagan que los servicios secretos del Elíseo habían logrado reclutar a un agente de la inteligencia soviética. Se trataba de un miembro de la KGB que pertenecía a la sección encargada de adquirir tecnología en Occidente.
El informe del doble agente llegó a manos de la Agencia Central de Inteligencia estadunidense (CIA) en agosto de 1981 y se llamó Dossier Farewell. En él se identificaba a cientos de oficiales de casos, suministradores de información y agentes enemigos.
Castro asevera que “la información más útil aportada por el Dossier la constituía ‘la lista de compras’ y sus objetivos en cuanto a la adquisición de tecnología en los años venideros”.
Añade que fue gracias a esa información que Estados Unidos logró derrumbar al bloque soviético, ya que los funcionarios del bloque capitalista sabían qué tecnología había que trucar antes de su venta y pudieron planear el sabotaje de la infraestructura de los países comunistas.