Encinas plantea construir acuerdos y consensos; Ortega pide discusión a fondo
Apoyan aspirantes a dirigir el PRD la propuesta de crear un solo partido
Ramírez Cuéllar solicita un espíritu abierto
Un paso necesario, opina Valenzuela
La propuesta del senador Carlos Navarrete de integrar en un nuevo instituto político a los partidos de la Revolución Democrática (PRD), Convergencia y del Trabajo (PT), fue bien recibida por cuatro aspirantes a la presidencia nacional del sol azteca, al considerar que ayudaría a unificar a la izquierda mexicana.
Sin embargo, Pablo Franco, dirigente de parte de la Red de Izquierda Revolucionaria, consideró que Navarrete lanzó la proposición como parte de una “disputa del poder al interior del partido”, y lamentó la ausencia del presidente nacional del PRD, Leonel Cota, porque “en los momentos más graves desaparece” y eso provoca que “los de la corriente Nueva Izquierda estén actuando como si ellos fueran los dueños del partido”.
Criticó que Navarrete hablara de conformar un nuevo partido sobre “la base de decisiones de corriente hegemónica”, y planteó que la elección para renovar la dirigencia nacional del PRD, deja entrever, con este tipo de actitudes, que el proceso “no será terso, porque vemos que algunos compañeros asumen acuerdos con sectores importantes del gobierno tomando las banderas de la izquierda”.
Por su parte, Alfonso Ramírez Cuéllar, aspirante a la presidencia nacional del sol azteca, resaltó que conformar un partido único no es debate nuevo. Después de la elección del 2 de julio de 2006 “cobró fuerza una propuesta que empezamos a generar los que venimos de la izquierda histórica para poder unificar a todos los grupos que no participan en el PRD”.
Ésta, indicó, “es una lógica que tenemos que reforzar para constituir un partido grande todas las izquierdas, movimientos sociales y grupos democráticos del país”. Debemos “tener un espíritu abierto para lograr la integración”, apuntó, y se pronunció porque se discuta en un congreso nacional.
A su vez, Camilo Valenzuela, otro de los precandidatos a la dirigencia nacional, manifestó que el planteamiento de Navarrete es “evidentemente un revire ante los cuestionamientos a veces bastante estridentes de PT, Convergencia y otros partidos por los cambios a la legislación electoral en materia de coaliciones”. Pero “es necesario dar paso a la unificación de las fuerzas políticas representativas del movimiento patriótico y democrático en el terreno electoral”, agregó.
Además, se pronunció por retomar el debate planteado en el PRD a principios de año, entre otras razones porque “nos ha ido de la patada en 14 procesos electorales y no es cosa de ver qué tuerquita apretamos o movemos”.
En tanto, Alejandro Encinas, otro aspirante a suceder a Cota Montaño, respaldó la propuesta de fusionar el Frente Amplio Progresista –integrado por PRD, PT y Convergencia– en un solo partido con Andrés Manuel López Obrador a la cabeza.
En conferencia de prensa en La Paz, como parte de la gira de proselitismo que realiza en Baja California Sur, expuso que sin duda López Obrador es el líder más importante de este movimiento y el PRD es resultado de la unificación de distintas izquierdas del país, por lo que debe seguir con ese proceso, pero antes hay que conocer la opinión de PT y Convergencia, porque no es un asunto de buena voluntad, sino que deben construirse los acuerdos y los consensos con estos partidos políticos.
Encinas sostuvo que “una ruta que debe seguir la izquierda es continuar con el proceso de unificación, y sería deseable avanzar por la conformación de un nuevo partido”. Resaltó que aunque la propuesta de Navarrete se da en el contexto del debate sobre la formación de coaliciones, es necesario discutirla, porque “nadie puede estar en contra de la unificación de la izquierda”. Pero que se den las condiciones para ello, opinó, lo decidirán nuestros aliados.
A su vez, Jesús Ortega recordó que en el PRD se ha insistido en la creación de un nuevo instituto político, en “términos de constituirnos como frente amplio, como el de Uruguay, donde hay una fusión de partidos sin que éstos pierdan su autonomía, pero sí participan como una sola fuerza en los comicios electorales”.
Se pronunció porque la propuesta se discuta a fondo, pues servirá para “evidenciar quién está en actitud consecuente con la unidad, no en términos de pelear frijoles o porcentajes, sino planteando un esfuerzo unitario para crear una gran fuerza que derrote a la derecha”.
Admitió que Navarrete presentó la propuesta para responder, de manera consecuente, “a quienes están hablando de unidad, porque detrás de la crítica se esconden las verdaderas intenciones”, y dijo que la figura puede darse a partir del FAP.
Trascendió que el cambio de coordinación de este bloque podría darse hasta enero. Se menciona como posibles sucesores de Ortega a Manuel Camacho Solís, Porfirio Muñoz Ledo, Javier González Garza y Pablo Gómez, entre otros.
Con información de Raymundo León, corresponsal