Expertos opinan sobre el deficiente sistema educativo
Los resultados de PISA reflejan la falta de políticas en la materia
Ampliar la imagen Expertos lamentaron los pésimos resultados obtenidos por México. En la imagen, Blanca Heredia, Josefina Vázquez Mota y Felipe Martínez Rizo al presentar el día 4 el informe PISA Foto: Yazmín Ortega Cortés
Rectores, académicos y maestros señalaron que los “pésimos” resultados obtenidos en el Programa Internacional para la Evaluación de los Alumnos (PISA) 2006, que ubica a México en los últimos lugares en competencias básicas de ciencias, matemáticas y lectura, corresponden a un sistema educativo que requiere una urgente reforma que vaya al fondo de los problemas y “no se quede únicamente en la aplicación de programas costosísimos que no nos han llevado a nada”.
Aseguraron que con un sistema nacional en crisis se propicia la creación de “generaciones perdidas, porque son miles de jóvenes que llegarán más tarde a las universidades sin saber leer, sin entender matemáticas y con graves problemas de comprensión.”
Francisco Martínez Neri, rector de la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca (UABJO), reconoció que es “gravísimo y preocupante” que México presente estos resultados, pues tan sólo en el caso de esa entidad, que se ubicó con un desempeño en ciencias y lectura menor a lo esperado, con casi 70 por ciento de sus jóvenes en los niveles cero y uno, es decir, los de más bajos aprovechamiento, “enfrentamos la realidad de que no se le puede pedir a un niño que no ha comido que aprenda y saque buenas notas”.
Por ello, demandó al presidente Felipe Calderón Hinojosa un “gesto de nobleza, pero sobre todo de Estado, para que frene la grave intromisión de prácticas sindicales nocivas en el sistema educativo del país, porque ahí tenemos los resultados. Si no se actúa a escala nacional para erradicarlas, tenemos rezago educativo para rato”.
Como rector, agregó, no comprendería que se siga propiciando “malas relaciones con quienes son responsables de lo que ocurre en materia educativa en México, porque a nadie le beneficia que personajes de la vida sindical, como quien ahora encabeza el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), sigan en una posición de privilegio”.
En tanto, expertos de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) señalaron que al analizar los pasados nueve años de “esfuerzos y reformas educativas, lo que resulta más alarmante es que la prueba PISA de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) revela que estamos en el mismo lugar y con la misma nota, pues a pesar de destinar una gran inversión de recursos públicos sólo se alcanzaron pequeños avances que ni siquiera son significativos en términos estadísticos”.
Manuel Gil Antón, catedrático de la UAM-Iztapalapa, afirmó que lo más valioso de PISA es que “nuevamente nos deja muy claro que no podemos mejorar la educación si no va acompañada del desarrollo del país, porque un Estado con 44 por ciento de su población en pobreza y 18 por ciento en pobreza extrema, no puede jalar ningún indicador educativo hacia arriba”.
A esto se suma, comentó, que desde la administración federal continúa un planteamiento “extraordinariamente pobre” de políticas públicas que sólo reflejan interés por mejorar “indicadores y, con ello, convertir el sistema educativo en un mecanismo de capacitación para obtener calificaciones de excelencia y no para mejorar la formación de millones de niños”.
En tanto, Sergio Martínez Romo, especialista en educación de la UAM-Xochimilco, señaló que en las metas educativas se ha “caído en un exceso de retórica política, pues en los objetivos estratégicos se percibe más retórica que un esfuerzo sistemático por aplicar acciones más profundas encaminadas a separar y diferenciar la gestión de la enseñanza y la administración de las relaciones laborales y políticas con el SNTE”.