El Premio Cervantes 2007 participó en la Cátedra Julio Cortázar, en Guadalajara
La poesía es una necesidad para quien la escribe y la lee, expresa Juan Gelman
Guadalajara, Jal., 7 de diciembre. El escritor Juan Gelman llegó a Guadalajara estrenando el Premio Cervantes 2007 invitado por la Cátedra Latinoamericana Julio Cortázar para hablar de poesía la cual, asegura, “es una necesidad para quien la escribe y la lee”. También adelantó que el lunes su nieta presentará una denuncia penal en contra de los militares que la privaron de su verdadera identidad.
Gelman manifestó estar contento con el galardón, porque al igual que el de Literatura Latinoamericana y del Caribe Juan Rulfo, que recibió en 2000, y el Reina Sofía de Poesía Iberoamericana, en 2005, son reconocimientos importantes que estimulan, pero “a las dos horas de atender el periodismo, uno se baja de la nube. Sin embargo, debo decir que en alguna medida ayudan a la difusión de la poesía premiada, aunque no escriben por uno. No soy mejor o peor poeta después del Cervantes que antes”.
El autor de Violín y otras cuestiones lamenta que la poesía tenga pocos lectores, pero, aclaró: “Son lectores, no son público, como suelen tener los de bestsellers. Creo que en todo esto interviene también un hecho económico en el sentido de que las grandes editoriales no se preocupan, con excepciones, en publicar poesía. Prefieren publicar 100 mil ejemplares de un bestseller, a publicar 100 títulos de mil ejemplares cada uno, que enriquecerían la lectura. Pero han nacido varias pequeñas editoriales que sí la publican.
“Un drama mayor al del poeta desconocido, es el de la gente que por razones de trabajo no tiene acceso a la educación, no tiene tiempo de leer, porque tiene que preocuparse por la sobrevivencia. Esta es una tragedia mayor que la del poeta que no es tan leído.
“Como lector estoy agradecido que existan poetas, aunque no creo que la poesía provoque revoluciones, pero puede provocar cambios en la gente que algún día protagonice esos cambios.”
El martes, en Argentina, el fiscal federal Federico Delgado solicitó al juez Daniel Rafecas un juicio oral y público de la causa en que investiga el asesinato de Marcelo Gelman, hijo del escritor. El pedido se enmarca en la causa que investiga los casos de detención, tortura y asesinatos ocurridos en el centro clandestino Automotores Orletti durante la dictadura.
“Esto es el resultado de una demanda de juicio que presenté hace años, se trata de los asesinos de mi hijo, entre ellos un general de división, vicecomodoro, coroneles, que eran muy jóvenes en ese entonces y fueron ascendiendo, pasaron desapercibidos porque en Argentina el Senado tiene que aprobar el nombramiento de coronel.”
Gelman destacó que en Argentina desde que comenzaron los gobiernos civiles, hasta que asumió el presidente Néstor Kirchner, “hubo una especie de capa de plomo de impunidad, tal vez más pesada que la dictadura misma”.