Hace más de tres décadas que los industriales mexicanos sobrexplotan la variedad azul
La producción masiva de tequila propicia la extinción del agave
El país posee 75 por ciento de las 200 especies de esa planta que se cultivan en el planeta
9 mil años de historia podrían perderse si no se detiene la tendencia: investigadora de UdeG
Ampliar la imagen Campos de agave en Arandas, Jalisco Foto: Arturo Campos Cedillo
En México, no sólo las plantas silvestres están en peligro de extinción, también corren ese riesgo las variedades cultivadas, como el agave.
Desde hace más de tres décadas, con la aplicación del modelo de agroproducción masiva y la explotación de una sola variedad, se puso en peligro a los agaves tequileros, pero también a los mezcaleros, pulqueros y fi-breros, advirtió Ana Valenzuela Zapata, investigadora de la Universidad de Guadalajara (UdeG).
La experta en etnoecología y en conservación de la biodiversidad, señaló que el riesgo de extinción no sólo afecta a las plantas silvestres, “también a las cultivadas, herencia de nuestros ancestros luego de miles de años de trabajar con plantas que fueron cuidadosamente seleccionadas, como el agave”.
“Estos procesos de cambio comenzaron hace muchos años y se relacionan incluso con las tradiciones, pues cuando se dejó de tomar pulque y aguamiel el consumo de bebidas se reorientó y por ello se afectaron unas 60 variedades de agave, lo que da idea de la riqueza de esta planta.
“Estamos ante una situación similar a la que vivió la industria vitivinicultora en Europa, que poseía 2 mil variantes o cepas; pero México tiene muchas más especies y variedades de agave, que son plantas con ciclos de vida muy largos.
“Por eso hacen faltan botánicos, etnobotánicos y antropólogos que ayuden a conservar una especie y fomenten el desarrollo en las comunidades que la han preservado”, señala.
Valenzuela Zapata fue galardonada el mes pasado con el Reconocimiento a la Conservación de la Naturaleza 2007, en la categoría de investigación, distinción que otorga la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas.
Riqueza biológica
Agregó que el país posee una enorme riqueza biológica, entre la que destaca el agave, pues de las más de 200 especies que existen en el planeta, 75 por ciento tienen su origen aquí y muchas son endémicas.
En México, señaló, tenemos agaves fibreros, como el henequén, así como variedades mezcaleras y pulqueras, además de aquellas que son utilizadas en alimentos o medicinas. Se trata de una planta con una “larga trayectoria para la humanidad: son más de 9 mil años de historia y de una rica selección de plantas”.
Valenzuela Zapata lanzó un llamado de alerta ante el riesgo que representa la “erosión genética del agave azul, base del tequila, y los efectos nocivos que esto representa para otras variedades”.
Destacó que existe un nuevo movimiento mezcalero mexicano que busca crear conciencia sobre el modelo de la agropexportación y el modo de producción homogéneo de la bebida.
“Se corre el riesgo no sólo de perder una importante riqueza biológica y genética, sino cultural, ya que los destilados de agave, como el tequila y el mezcal, no se reducen únicamente a una bebida, son también patrimonio cultural de México.”