Sólo pobreza generan las presas, afirma Mapder

El Movimiento de Afectados por las Presas y en Defensa de los Ríos (Mapder) señaló que no ha habido una justa indemnización a los campesinos desalojados de la zona donde se construyó la hidroeléctrica El Cajón, en Nayarit, la cual se realizó bajo amenazas, coerciones, mentiras y falta de información por parte de funcionarios de la Comisión Federal de Electricidad. En un pronunciamiento sobre la situación de los campesinos desplazados en Nayarit, pidió una justa indemnización para los residentes de El Ciruelo, así como el cese en la construcción de las presas en el país, lo cual provoca el desplazamiento de población campesina e indígena; ha sido ella la que ha debido enfrentar más miseria y migración, en aras del “supuesto desarrollo”, señaló. También se refirió a que la CFE “sigue causando confusión para lograr imponer la presa La Parota en Guerrero, pese a los amparos otorgados a los campesinos” y a que existe una suspensión provisional en la construcción porque el proceso jurídico aún no concluye. Advirtió que los campesinos de la comunidad El Ciruelo en Nayarit fueron engañados, por lo que en días pasados realizaron una marcha que culminó en un plantón en la ciudad de Tepic. Detalló que las reubicaciones fueron “mal hechas” y las viviendas son de pésima calidad, además de que la población no ha recibido su justa indemnización por las tierras inundadas, donde especies únicas de ciruelo quedaron bajo el agua. Precisó que de esos árboles vivía la comunidad y que de la cosecha de cada uno obtenían alrededor de mil pesos, pero cada ejemplar la CFE lo pagó entre 300 y 800 pesos. La pobreza es el común denominador que dejan los proyectos de las grandes hidroeléctricas, indicó la organización. Además ante posibles inundaciones por el destape el río Grijalva, entre las presas Malpaso y Peñitas, ha habido más desplazados forzosos y han sido obligados a abandonar sus tierras, casas, así como su patrimonio.