Ignacio Escárcega hace un diagnóstico de la actualidad de ese arte en el país
Hay que “devolver al teatro la capacidad para activar la discusión pública”
El funcionario espera que en 2008 se generen propuestas atractivas e incluyentes para la comunidad teatral
Con Iberescena se busca revertir rezagos en Iberoamérica, dice
El gran reto para el teatro en México consiste “en poder devolverle una presencia de peso en la sociedad mexicana, en la discusión nacional”. De ello está convencido Ignacio Escárcega, quien fue ratificado como titular de la Coordinación Nacional de esa especialidad, dependiente del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA).
En entrevista con motivo de la participación de nuestro país en el Programa Iberescena 2007, el funcionario considera que la consecución de ese propósito depende de diversos factores, no sólo de la producción y lo concerniente con ésta.
También de “la idea que el ciudadano tiene del teatro, la que tienen los intelectuales y esto lleva a preguntarnos por qué los grandes pensadores mexicanos, los grandes críticos, los periodistas relevantes no van a él. Y no me refiero sólo al que se hace en el INBA o en la Universidad Nacional Autónoma de México, sino al teatro como experiencia general”, sostiene.
“Hace falta que el teatro recupere su importancia en la sociedad mexicana. La oferta y la calidad ahí están. Hay que pensarlo de otra manera, nada más. Si le preguntamos a una alta figura de la cultura mexicana cuál fue la obra más reciente que vio en México, seguramente que nos vamos a asustar un poco”.
Por ganar más espectadores
Tras ubicar que esa incidencia del arte teatral en la sociedad se perdió alrededor de hace 15 años, Escárcega, en una especie de diagnóstico, observa “un panorama variado” en el ámbito teatral mexicano actual.
“Es decir, hay cosas en el teatro que te devuelven la esperanza, te llenan de entusiasmo, pero hay cosas que a veces no funcionan como debiera ser. Mi percepción del teatro es que está vivo, latiendo y diciendo cosas.”
A partir de esa consideración, expresa su confianza de que en 2008, desde dicha coordinación, “pueda generar proyectos que resulten atractivos e incluyentes para la comunidad teatral; que sean pertinentes, que le devuelvan al teatro sus capacidades de sorpresa y de activación en la discusión pública, con esto me refiero a los espectadores, y que se puedan mejorar los programas de educación básica”.
Sobre ese último aspecto, indica el énfasis que se hará en el teatro escolar, para ir ganando más espectadores a corto y mediano plazos, iniciativa en la que será determinante el papel de la Secretaría de Educación Pública, y dentro de la cual se prepara ya para el año próximo un encuentro nacional de teatro escolar.
Acerca de la restructuración de la Compañía Nacional de Teatro, Escárcega dijo que, a excepción de que actualmente se trabaja para que ésta tenga todos los amarres jurídicos y administrativos, no sabe más del asunto, pues es algo que se está afinando directamente en el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes.
Interlocuciones entre proyectos y artistas
En torno del Programa Iberescena, Escárcega explica que se trata de un fondo conjunto de un millón 100 mil dólares, acordado en la decimosexta Cumbre Iberoamericana por siete países, entre ellos México, para ejercerlo de manera anual, a partir de 2008, y apoyar la construcción de un espacio escénico en la región iberoamericana, aspecto en el que, describe, se mantiene un rezago en relación con otras partes del mundo, como la Unión Europea y Estados Unidos.
“Es una oportunidad inédita para promover la circulación de espectáculos, festivales y proyectos creativos que conforman esta red. Lo que hace esta propuesta es abrir una serie de puertas para que haya interlocuciones entre proyectos y artistas.”
El primer proyecto apoyado por el fondo será uno de México, el del grupo Fayuca Teatro Contrabando, que tendrá lugar a mediados de enero en el Centro Cultural Helénico, con la participación de artistas y grupos de España, Argentina, Rusia, así como puestas en escena nacionales, y que también considera la impartición de diferentes talleres, entre ellos de dramaturgia, dirección y actuación.