Efecto colateral de la guerra sucia, destacan
Exigen ONG al Estado indagar asalto en la diócesis de Saltillo
Organizaciones civiles defensoras de los derechos humanos (ONG) señalaron que el gobierno federal debe realizar una investigación a fondo en torno al robo con violencia de documentos del Centro de Derechos Humanos de la diócesis de Saltillo, Coahuila.
Advirtieron que dicha indagatoria debe responder a si se trato de un simple asalto o si forma parte de la serie de actos intimidatorios que en las últimas fechas ha padecido directamente el obispo Raúl Vera.
La Liga Mexicana por la Defensa de los Derechos Humanos (Limeddh) y la Red Nacional de Organismos Civiles de Derechos Humanos Todos los Derechos para Todas y Todos consideraron que las autoridades no deben permitir que “en este contexto de agresiones contra el obispo de Saltillo este hecho quede como aislado”.
Los frentes sociales condenaron los hechos de este viernes, en que –según se informó– dos encapuchados asaltaron la sede de la diócesis de Saltillo, Coahuila, que encabeza Vera López, y coincidieron en que “nuevamente nos estamos acercando a la visión de los efectos colaterales de la guerra sucia”.
Edgar Cortez, de la Red, consideró que el robo se inscribe “en esas acciones que en principio se plantean como una situación de hostigamiento y amenaza contra el trabajo de los defensores, por lo que estos hechos deben ser adecuadamente investigados por las autoridades competentes para identificar a los responsables y aplicar la ley”.
Advirtió que el asalto es un signo de que se están incrementando las agresiones contra Vera López y su equipo de trabajo, debido a que en las últimas fechas el religioso ha sido sometido a “severos cuestionamientos y presiones” por sectores conservadores del clero mexicano, el Vaticano y el gobierno federal.
“Tiene que haber una acción muy clara de las autoridades sobre estos hechos de agresión al trabajo de los integrantes de las organizaciones defensoras de los derechos humanos”, apuntó.
Adrián Ramírez, de la Limeddh, afirmó que en el país “nuevamente nos estamos acercando a los llamados efectos colaterales de la guerra sucia, que mediante la instigación y la intolerancia, grupos oscuros de personas que pensamos podrían tener relación con personas del Estado desarrollan diversas acciones, que van desde este tipo de actos vandálicos hasta amenazas, robos, aparentes accidentes y daños extraños”.