Reporte de Protección Civil de la ALDF
Vive 37% de capitalinos en zonas de alto riesgo
Ampliar la imagen Aspecto de la sierra de Santa Catarina, en la delegación Iztapalapa, donde en la actualidad son visibles los grados de marginación que enfrentan los habitantes del lugar Foto: La Jornada
El 37 por ciento de la población del Distrito Federal vive en áreas catalogadas como de alto riesgo sísmico, señala un reporte de la Comisión de Protección Civil de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF), en el que se precisa que las delegaciones en estas condiciones son: Álvaro Obregón, Cuauhtémoc, Benito Juárez, Gustavo A. Madero y Venustiano Carranza.
Con base en cifras del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) se detalla que el número de habitantes afectados podría ascender a tres millones 223 mil 552.
De los cuales 706 mil 576 habitan en Peñitas, Paraje el Caballito, Loma Nueva, Hogar y Redención, Las Piritas Oriente y Poniente, delegación Álvaro Obregón; 355 mil 17 en General Anaya, Carmen, Portales Norte y Sur, Albert, Zacahuitzco y Narvarte Poniente, Benito Juárez; 521 en Condesa, Cuauhtémoc, Guerrero, Hipódromo, Juárez, Maza, Morelos, Peralvillo, Roma Norte, Tabacalera y Nonoalco Tlatelolco, la de más alto Riesgo, en Cuauhtémoc; un millón 193 mil 161, en Guadalupe Tepeyac, Industrial y San Juan de Aragón (Zona de Lagos), en Gustavo A. Madero, 447 mil 459, en Peñón de los Baños, Gómez Farias, Zaragoza, en Venustiano Carranza.
Mientras que 121 escuelas públicas del nivel básico, a las que asisten cerca de 10 mil estudiantes, ubicadas en las delegaciones Azcapotzalco, Benito Juárez, Coyoacán, Cuajimalpa, Cuauhtémoc, Iztacalco, Iztapalapa, Gustavo A. Madero, Magdalena Contreras, Miguel Hidalgo y Venustiano Carranza, son consideradas de riesgo por encontrarse cercanas a taludes o áreas donde se registran inundaciones y encharcamientos.
En este escenario, la Procuraduría Ambiental y del Ordenamiento Territorial (PAOT) advirtió que los asentamientos humanos irregulares y el depósito de residuos sólidos urbanos y de manejo especial en las barrancas de la ciudad de México han generado cambios ambientales significativos que no sólo colocan en una situación de vulnerabilidad estos sitios, sino que también aumentan los riesgos cuando se asocian a fenómenos meteorológicos.
La titular del organismo, Diana Ponce Nava, señaló que, por ejemplo, los huracanes Dean y Henriette aportaron precipitaciones pluviales en niveles promedio de 193.7 milímetros que trajeron como consecuencias principales inundaciones y deslaves en un mayor número que en años anteriores.
Tan sólo en la delegación Álvaro Obregón en un día se registraron 25 deslaves en distintos puntos y en diferentes dimensiones, cuando ese mismo número se reportó durante todo el 2006, refirió.