Efectos positivos del TLC, lejos de pequeñas y medianas empresas
Nulo aporte de la IP a investigación y desarrollo tecnológico, señala ONUDI
En México, el sector privado apoya y “aprovecha muy poco” la investigación y desarrollo tecnológico, ya que a pesar de ser factores fundamentales para elevar la productividad, las dos terceras partes de los recursos que los nutren provienen de fondos públicos, advirtió la Organización para el Desarrollo Industrial de Naciones Unidas (ONUDI).
A la fecha, señaló, el país cuenta con industrias de alta tecnología pero tienen poca vinculación con el resto de la economía, además de que hasta el momento “los efectos positivos” que se esperaba provocaría el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) para el sector industrial mexicano no están disponibles para las pequeñas y medianas empresas.
Según el organismo, entre los años 1995 y 2005 México duplicó los fondos para investigación y desarrollo pero aún así permanece distante de lo que invierten otros países que forman parte de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
Reconoció que el país ha mostrado también “avance en todas las áreas del sistema educacional”, pero recomendó que debe enfocarse más en la educación y capacitación de profesionales, sobre todo científicos e ingenieros, para el sector de las pequeñas y medianas empresas.
Lo anterior forma parte de una presentación que el director la ONUDI en México, Kai Bethke, hizo ante integrantes de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), en la que ponderó que la tecnología resulta determinante para las condiciones internas de la economía de un país y que para potencializarla se debe desarrollar el capital humano, la investigación y el desarrollo.
Para Kai Bethke las autoridades deben impulsar una política pública que contenga un sistema nacional de innovación de todos los actores económicos ya que prevalece la separación tanto entre las organizaciones científicas y las universidades con el sector productivo, como entre las grandes compañías tractoras o multinacionales con la mayoría de las micro, pequeñas y medianas empresas que operan en el país.
Por ello, se deben establecer vínculos entre los sectores separados de la economía y fortalecer a las pymes en tecnología y capacitación profesional, pero también crear un sistema de evaluación continua para ajustar y mejorar los esfuerzos públicos mediante monitoreos.
ONUDI no descartó tampoco que para potencializar las políticas públicas que se encaminen hacia un sistema nacional de innovación se busque una relación más estrecha en el ámbito de ciencia y tecnología con los socios comerciales de México en el TLCAN, es decir con Estados Unidos y Canadá.