Publican desplegado que censura actuación de la AFI
Eduardo García Valseca, secuestrado durante meses
Guanajuato, Gto., 31 de enero. La Procuraduría General de Justicia del Estado de Guanajuato (PGJEG) confirmó esta tarde que el empresario Eduardo García Valseca permaneció privado de su libertad en algún lugar del estado desde junio del año pasado y fue liberado el 24 de enero.
Hoy se publicó en medios locales una carta abierta dirigida al presidente Felipe Calderón Hinojosa, en la que un grupo de ciudadanos –quienes no firmaron el desplegado “por temor a represalias”– aseguran que la estrategia que empleó la Agencia Federal de Investigación (AFI) fue realizar un “intercambio de rehenes”, toda vez que no se pudo pagar el rescate de García Valseca por ser éste el único autorizado para disponer de los recursos de sus cuentas bancarias.
Fuentes de la PGJEG revelaron que el empresario, hijo del coronel José García Valseca, quien fuera propietario de Organización Editorial Mexicana, fue secuestrado el 7 de junio cuando se dirigía a la escuela de sus hijos, en San Miguel Allende, pero esa dependencia no intervino a petición de la familia, que puso el caso en manos de la Procuraduría General de la República.
De acuerdo con la misma fuente, los captores de García Valseca pedían “cantidades millonarias” y no aceptaron negociar el monto. “Tenemos entendido que la negociación no avanzó porque el afectado es el único que tiene acceso a sus cuentas bancarias y nadie más puede disponer de efectivo.”
A raíz de ello, la familia del secuestrado pidió la intermediación de la PGR, la cual resultó “ineficaz”, pues tras la liberación del empresario un amigo de él que iba a negociar con los secuestradores fue capturado para presionar a fin de que se pagara el rescate demandado originalmente.
El 24 de enero García Valseca fue liberado, pero como no se cubrió el monto total del rescate sólo fue un intercambio de rehenes, pues los captores aún insisten en que el empresario pague el rescate que se le había exigido.
En el desplegado dirigido al Presidente de la República, se dice que la comunidad extranjera que vive en la entidad está nerviosa, pues “la familia Valseca cayó en otra trampa” porque confió en que “después de dar el rescate se iba a terminar la pesadilla”, pero la AFI permitió que los secuestradores intercambiaran al secuestrado por uno de sus amigos, “poniendo en peligro mortal a otro rehén. ¿En dónde estaba la AFI cuando se entregó el rescate y se llevaron al otro señor? ¿Tal vez atrás del escenario para asegurar que el negocio saliera bien?”, concluye.
Aún se desconoce el paradero del segundo rehén y el monto que se pide por liberarlo.