Usted está aquí: domingo 3 de febrero de 2008 Sociedad y Justicia Divertículos, mal presente en dos tercios de la población

Laparoscopia, opción quirúrgica escasa en México

Divertículos, mal presente en dos tercios de la población

Ángeles Cruz Martínez

Entre las cirugías de mínima invasión con alto grado de complejidad, la colorrectal ocupa el segundo sitio, después de las indicadas para el tratamiento de la obesidad. Hasta un tercio de la población en algún momento de la vida presenta padecimientos como protuberancias en la parte externa del intestino (divertículos), por lo que se requiere intervención quirúrgica.

Quintín Héctor González Contreras, experto en cirugía colorrectal del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y de la Nutrición (INCMN) Salvador Zubirán, afirmó que los divertículos están entre las principales causas de consulta de gastroenterología, aunque en la mayoría de hospitales públicos y privados, el problema se resuelve mediante una cirugía abierta.

Sólo en tres o cuatro unidades médicas del país los enfermos tienen acceso a una intervención de mínima invasión (laparoscopia), que además de sólo requerir una herida muy pequeña, permite la recuperación y reincorporación del individuo a sus actividades normales, en pocos días.

Del total de personas que desarrollan divertículos, una tercera parte tiene complicaciones, lo que las convierte en candidatas a la cirugía, explicó González.

Respecto de los síntomas que permiten identificar la presencia de las protuberancias intestinales, mencionó que van desde acumulación de gases e inflamación del vientre después de comer; en los casos más complicados, hasta dolor en la parte inferior izquierda del vientre, fiebre, aumento de la frecuencia cardiaca y de la presión arterial, y sangrado.

La enfermedad se origina por diversos motivos, entre ellos la edad, una dieta baja en fibras, estreñimiento y malos hábitos para evacuar. González también mencionó que conforme aumenta la edad, también se incrementa el riesgo de sufrir este mal.

Resaltó que la cirugía de mínima invasión para el control de esta enfermedad únicamente se practica en el Hospital Militar, el Hospital Universitario de Monterrey y el INCMN.

 
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