Comienza juicio contra Nicolaides, ex jefe del ejército de Argentina
Buenos Aires, 5 de febrero. La justicia federal de la provincia de Corrientes, al noreste de esta capital, comenzó hoy el primer juicio oral que se realiza en el interior del país para juzgar a seis militares de la pasada dictadura (1976-1983) por delitos de lesa humanidad, entre ellos el ex jefe del ejército Cristino Nicolaides, en el contexto de una fuerte tensión por la presencia de grupos ligados a los acusados que se enfrentaron con los familiares de las víctimas.
El juicio empezó esta mañana en la sede de la Cámara Federal de Corrientes, cuando el Ministerio Público pidió procesar a Nicolaides –el gran ausente de esta sesión por enfermedad–, al capitán Juan Carlos Demarchi, a Horacio Losito, ex agregado militar en la embajada argentina en Italia, al coronel Rafael Barreiro y a los gendarmes Roberto Reynoso y Carlos Piriz, por los delitos de secuestro, tormentos y desaparición forzada de personas.
Todos, con excepción de Nicolaides, actuaron en el regimiento de infantería número 9 de Corrientes y están procesados con prisión preventiva por las desapariciones de Juan Ramón Vargas, dirigente de las Ligas Agrarias; Rómulo Gregorio Artieda, militante de la Juventud Peronista, y Vicente Víctor Ayala, Julio Barosi, Jorge Saravia Acuña y Orlando Diego Romero.
Madres Fundadoras de Plaza de Mayo, representadas en este caso por Taty Almeida, manifestaron que éste es “otro día histórico para la justicia y la verdad. Es el primer juicio después de más de 30 años de espera en que se juzgan en el interior del país los delitos de lesa humanidad cometidos por militares de la última dictadura”.
También estuvieron allí, entre otros, Lita Boitano, de la organización de Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas, y la diputada Victoria Donda, hija de desaparecidos y quien fue apropiada y entregada a una familia por su propio tío, uno de los llamados “verdugos”, de la Escuela de Mecánica de la Armada.
La sorpresa de este día fue la llegada de un grupo de apoyo a los militares juzgados y la presencia de Cecilia Pando, una activa dirigente de éstos, que defiende a la dictadura y ha llamado a golpes de Estado.
Éstos insultaron a familiares de las víctimas y organismos humanitarios y sociales que se manifestaban fuera del recinto judicial, y también agredieron a un periodista del Canal 7 (estatal), lo que obligó a la intervención de la policía. El juicio podría durar unos cuatro meses.