Tres meses de prisión y una multa de 10 mil euros
Condenan en Francia a Le Pen por declaraciones sobre el nazismo
París, 8 de febrero. El líder de extrema derecha francesa, Jean Marie Le Pen, fue condenado este viernes a tres meses de prisión en suspenso y al pago de una multa de 10 mil euros por unas polémicas declaraciones sobre el nazismo.
“Por lo menos en Francia la ocupación alemana no fue especialmente inhumana, aunque haya habido abusos inevitables en un país de 550 mil kilómetros cuadrados”, declaró el jefe del Frente Nacional.
El tribunal penal parisino consideró esta manifestación como “complicidad en apología de crímenes de guerra y negación de crímenes contra la humanidad”.
El abogado del político ultraderechista sostuvo que el tribunal acusó a su cliente de no haber mencionado determinados hechos ocurridos durante la guerra: “Eso hace imposible una defensa”, se quejó.
Le Pen, de 79 años, ya fue condenado en varias oportunidades, en particular por pronunciamientos racistas y se declaró víctima de “persecución”, y aseguró que no se siente “absolutamente culpable”.
Por otro lado, el presidente Nicolas Sarkozy prometió 4 mil agentes de policía más para llevar a cabo una “guerra sin cuartel” contra las bandas y los traficantes de droga en suburbios pobres, muchos de los cuales protagonizaron esporádicos estallidos de violencia desde los disturbios de 2005.
El plan de Sarkozy para regenerar las barriadas de diversidad étnica es una respuesta a las semanas de violencia juvenil y escenas de quemas de coches que ocuparon los titulares de las portadas de los diarios hace tres años y desde entonces se han repetido esporádicamente.
Sarkozy prometió 500 millones de euros para mejorar las conexiones del transporte con las áreas más difíciles y permitir un “rápido fin de los guetos en las barriadas más aisladas”, que a menudo se desvinculan del centro de las ciudades a pesar de estar geográficamente cerca.
También prometió más oportunidades de empleo y contratos especiales de aprendizaje para ayudar a los jóvenes a encontrar trabajo, y planes para enviar a los niños a colegios en diferentes áreas para garantizar una buena mezcla social.
Sarkozy desveló sus planes poco antes de las elecciones municipales del 9 y el 16 de marzo. Su popularidad ha caído desde principios de año y su partido teme que lo pague en las urnas.