Becario estadunidense denuncia en La Paz que su país le pidió espiar en Bolivia
Aprueba tribunal electoral un referendo para la secesión del departamento de Santa Cruz
La consulta popular se realizará el 4 de mayo para aprobar o no un estatuto de autonomía
La Paz, 9 de febrero. Un tribunal electoral aprobó que el próspero departamento boliviano de Santa Cruz, bastión de la oposición al gobierno de Evo Morales, vaya a referendo popular el 4 de mayo próximo para aprobar su estatuto de gobierno autónomo, informaron hoy medios de prensa locales.
La resolución de la Corte Electoral emitida el viernes establece que asume la función de “administrar y ejecutar el referendo departamental para la ratificación y puesta en vigencia del Estatuto del Departamento Autónomo de Santa Cruz, a realizarse en esa entidad el día domingo 4 de mayo”.
Santa Cruz, que concentra millonarias inversiones y actividades agroindustriales, busca dotarse de una norma legal para autogobernarse, en rechazo a la nueva Constitución, que considera de corte estatista que apoya el gobierno de Morales.
En la consulta se preguntará a la ciudadanía de Santa Cruz, unos 700 mil electores, si aprueban o no el estatuto autonómico, redactado en diciembre por una junta de congresistas locales, munícipes, asambleístas opositores y dirigentes vecinales.
El Ejecutivo, que considera secesionistas las ideas autonomistas, no hizo comentario sobre el futuro referendo, pero ha dicho con anterioridad que esas consultas regionales tienen que ponerse a consideración del Congreso Nacional y de la nueva Constitución Política.
Santa Cruz es el primer departamento que logra que un tribunal electoral le apruebe una fecha para un referendo, cuyo objetivo también persiguen las provincias de Beni, Pando, Tarija y Chuquisaca.
Por otra parte, el becario estadunidense Alex Shaick denunció en La Paz que la embajada de su país en Bolivia le pidió espiar para Washington, al solicitarle información sobre trabajadores venezolanos y cubanos que laboran en el país.
Aunque el Departamento de Estado estadunidense negó las acusaciones y sostuvo que tales solicitudes contravienen sus normas, la embajada admitió que en algunas reuniones sobre seguridad incluyeron “información incorrecta” y prometió solucionar esto de inmediato.