Usted está aquí: jueves 14 de febrero de 2008 Política Grupos causan fricciones para dañar las relaciones México-Venezuela: Chaderton

El embajador afirmó que son excelentes las relaciones entre ambos países

Grupos causan fricciones para dañar las relaciones México-Venezuela: Chaderton

Recientemente tuvo un encuentro “civilizado” con directivos del Grupo Bimbo

José Antonio Román

Ampliar la imagen Ray Chaderton, embajador de Venezuela en México, reconoció el papel de los empresarios mexicanos en su país. La fotografía del diplomático corresponde a un acto en el Zócalo en enero pasado Ray Chaderton, embajador de Venezuela en México, reconoció el papel de los empresarios mexicanos en su país. La fotografía del diplomático corresponde a un acto en el Zócalo en enero pasado Foto: Francisco Olvera

El gobierno de Venezuela tiene “excelentes” relaciones con las empresas mexicanas, que desde la llegada del presidente Hugo Chávez al poder han multiplicado su presencia e inversiones, dijo el embajador venezolano Roy Chaderton Matos. Sin embargo, advirtió que existen grupos y personas interesadas en causar “fricciones” diplomáticas entre los gobiernos de México y Caracas.

Prueba de ello, dijo, es el robo –en Venezuela– de una carta privada enviada a la cancillería de su país en la que se plantea una “averiguación” en torno al financiamiento a grupos de ultraderecha que pretenden desestabilizar el gobierno del presidente Hugo Chávez, y donde se cita al empresario mexicano Lorenzo Servitje, fundador del Grupo Bimbo, empresa que tiene fuerte presencia y grandes inversiones en Venezuela.

La misiva fue entregada a la “emisora golpista” Globovisión para lograr una respuesta de opinión de personajes vinculados a la ultraderecha venezolana, la cual efectivamente se produjo, dijo.

En entrevista con La Jornada, el diplomático reveló haberse reunidos recientemente con “directivos” del Grupo Bimbo, encuentro que calificó de “civilizado”. En esa reunión, agregó, “se aclararon entendidos, sobrentendidos y malos entendidos”.

Inclusive, el embajador Chaderton rechazó categóricamente haber sido requerido por las autoridades de la Secretaría de Relaciones Exteriores mexicana para aclarar el tema, y mucho menos haber sido llamado a consultas por la cancillería de su país, como afirman algunas versiones periodísticas. “Eso es falso, son mentiras”.

Del encuentro con los directivos de Bimbo, dijo que fue positivo. “Hay de ambas partes el reconocimiento de que la empresa produce alimentos en cantidades muy importantes para el país y esperamos que continúe el esfuerzo de abastecimiento en Venezuela para enfrentar el sabotaje alimentario que forma parte de los planes de la ultraderecha venezolana, que tiene apoyo internacional”, subrayó.

Dijo que las relaciones comerciales con empresas mexicanas son “excelentes” y que a partir del gobierno del presidente Chávez dichas empresas han multiplicado sus inversiones y presencia en Venezuela. Además, informó que a partir de la salida de su país del llamado G-3 –conformado junto con México y Colombia–, el intercambio comercial entre ambos países se han incrementado, “situación que no lo podrían explicar los economistas ortodoxos, pero es una realidad”.

Durante la entrevista realizada en su despacho, el diplomático remarcó que el gobierno de Venezuela tiene la “firme voluntad de facilitar la inversión y la vida” a las empresas mexicanas que tiene presencia en su país.

“Vemos con optimismo los aportes de las empresas mexicanas instaladas en Venezuela, que están haciendo a favor del abastecimiento de nuestros mercados”.

Y aunque el embajador dice querer “pasar la página” sobre lo ocurrido con la empresa Bimbo, tampoco deja de denunciar a la Organización Demócrata Cristiana de América, de la que su presidente actual es el antiguo dirigente nacional del PAN, Manuel Espino, como un ente que desde hace años “ha hecho aportes y esfuerzos” para desestabilizar la democracia venezolana, y que sin duda alguna financia a grupos ultraderechistas en su país.

Dijo que esto conforma una campaña internacional en contra del gobierno del presidente Chávez. Y entre broma y tintes de seriedad, recordó un viejo dicho venezolano: “yo no creo en las brujas, pero de que vuelan, vuelan”.

 
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