Sólo aprovechó la reforma fiscal y los altos precios del petróleo
El gobierno no tiene plan anticíclico ante la recesión en EU, critica IMEF
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El secretario de Hacienda, Agustín Carstens, y la tesorera de Estados Unidos, Ana Escobedo Cabral, participaron en Washington en la inauguración del taller sobre inclusión financiera en América Latina
Foto: Notimex
El gobierno federal no tiene un plan anticíclico para reducir el impacto de la recesión económica en Estados Unidos, únicamente ha aprovechado la reforma fiscal, la coyuntura energética con altos precios de petróleo y las inversiones del programa de infraestructura, para hacer creer que se encuentra preparado para enfrentar la crisis, denunció el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF). Los integrantes del comité directivo del organismo advirtieron que tratar de utilizar esos programas estructurales como anticíclicos puede provocar más daños que beneficios.
El presidente del IMEF, Federico Casas-Alatriste, dijo que “no debemos confundirnos; podemos caer en la trampa del falso dilema de tener que escoger entre resolver lo urgente o lo importante; de tener que dejar la resolución de asuntos trascendentes para cuando encontremos un remanso que nos permita las circunstancias”.
En un documento difundido a la prensa se hace mención de la inversión en infraestructura proyectada por el gobierno federal. “No es realmente una política fiscal contracíclica, pues tuvo lugar en un incremento en los impuestos para financiar el mayor gasto en infraestructura. Una política fiscal contracíclica se concibe como un cambio a la baja en el balance público, ya sea a través de mayor gasto o menores impuestos”, indica.
Añade: “En principio, la devolución de impuestos significa mayor capacidad de gasto privado, que es más eficiente que el gasto público. Los efectos del mayor gasto en infraestructura (además) no son inmediatos”.
Aunque en los análisis no se considera que la recesión económica estadunidense afecta de manera profunda o alarmante a México, como ocurrió en 2001, se reconoce que el país no cuenta con el suficiente margen de maniobra, como su vecino del norte, para aplicar una política anticíclica, pues todavía arrastra problemas estructurales.
Para el organismo que agrupa a los encargados financieros de las principales empresas del país, presentó un análisis en el que considera que la recesión en Estados Unidos “ya es un hecho”, y en México la actividad manufacturera muestra signos de debilidad.
De acuerdo con el IMEF existen elementos que podrían mitigar el impacto de la recesión económica en Estados Unidos, entre los que mencionó la diversificación de exportaciones.