Ante el resultado, el conjunto chiapaneco dio de baja al técnico René Isidoro García
Con dos goles de Solari, Pumas goleó a un ineficaz Jaguares
El timonel rehusó hablar con la prensa
Los auriazules sumaron siete de nueve puntos posibles en la presente semana
Pese al triunfo, Efraín Velarde consideró que todavía les falta mejorar; fue su último partido antes de incorporarse a la Sub-23
Ismael Íñiguez volvió a anotar
Ampliar la imagen Esteban Solari, del cuadro de la UNAM, se mostró incisivo contra Jaguares, en el estadio Olímpico Universitario Foto: Marco Peláez
Aunque no mostró buen futbol, Pumas dio cuenta 4-1 de Jaguares en el estadio Olímpico Universitario –y aceleró la salida del estratega René Isidoro García– para acumular siete de nueve puntos disputados en la presente semana y recuperar el ánimo extraviado por el mal inicio de campaña.
El argentino Esteban Solari abrió el tanteador al minuto 19, incrementó al 47 y su compatriota Ignacio Scocco abultó al 71 con el 4-0, pues antes, al 59, Ismael Íñiguez se cubrió de gloria al hacer el 3-0. Por los desorientados visitantes Juan Pablo García firmó el único gol, al 87.
Con la victoria, los auriazules suman siete unidades, en el grupo uno, empatados con el Puebla, en el cuarto sitio, y dejaron al cuadro chiapaneco un lugar abajo, con seis puntos, en el mismo sector y sin timonel, ya que después de terminado el partido la directiva dio de baja al estratega, quien no quiso atender a los medios en el estadio luego de la derrota sufrida y sólo apuntó: “Hoy no hablo”.
Pumas se lanzó al ataque desde el silbatazo inicial y antes del tercer minuto ya había demostrado al rival de lo que estaba dispuesto, con una llegada sorpresiva y, aunque se adueñó prácticamente del terreno de juego, los yerros fueron el común denominador.
En el minuto 19 fue cuando los anfitriones lograron la contundencia, al cobrar un tiro de esquina; Solari remató el esférico para el 1-0, ventaja con la que se fueron al descanso.
Sin armar una estrategia defensiva adecuada, Jaguares salió al complemento con el mismo descontrol mostrado en los primeros 45 minutos, y de nuevo Solari se hizo presente.
Fue en una acción cuando el portero Édgar Hernández intentó salir jugando, pero se topó con Leandro Augusto, quien robó el esférico y disparó a quemarropa; si bien el guardameta logró desviar, puso el balón en los pies del argentino, quien sólo empujó a las redes. Era el 2-0.
Los de la UNAM no cambiaron su dinámica y siguieron dominando, aunque en una llegada del cuadro chiapaneco, por conducto del Bofo Bautista, el portero Sergio Bernal lo hizo rodar para evitar que disparara, pero el silbante Mauricio Morales consideró que el delantero se echó un clavado.
A ratos parecía que los auriazules no tenían rival, entraban a velocidad, pero fallaban al momento de definir. No obstante, al 59, el mismo héroe de la semana anterior, Ismael Íñiguez, recibió un servicio de larga distancia; se acomodó, leyó la duda en la salida de Hernández y marcó el 3-0.
De nuevo se descuidó Jaguares y Solari cedió el balón a Scocco, quien con toque privilegiado firmó el 4-0 e hizo a la tribuna clamar: “Cinco... cinco... cinco”, pero se quedó con las ganas.
Parecía que Jaguares seguiría sumando más de 350 minutos sin anotar, pero al 87 Juan Pablo Loquito García lanzó un obús que dejó sin oportunidad a Bernal, para el de la honra.
Al finalizar el encuentro, el zaguero Efraín Velarde admitió que, pese a la goleada, a Pumas le hace falta mejorar y debe lograrlo a la brevedad posible, aunque se va tranquilo al dejar a su escuadra en pleno ascenso, para integrarse a la concentración con el seleccionado que buscará su boleto a los Juegos Olímpicos de Pekín 2008.
Solari espera que su equipo, con las victorias logradas en la semana, se mantenga sereno y con la humildad de la que ha hecho gala hasta ahora, porque sabe que esto apenas empieza y es como si nada hubieran logrado.
Íñiguez dijo que desde afuera la escuadra chiapaneca se vio “como entregada”, pero ningún rival lo hace y, en todo caso, Pumas supo aprovechar las circunstancias.